Fuente: https://www.vanguardia.com
Lo único que los palmeros dan por sentado es que la volatilidad de los precios es el “mayor de sus racimos”.
Si bien hoy se vive una “bonancita”, no quiere decir que mañana la situación sea la misma.Incluso, se puede tener una caída de precios de un 50% o más de un momento a otro.
¿A qué obedece ese fenómeno económico?
De acuerdo con Jens Mesa Dishington, director ejecutivo de la Federación Nacional de Palmicultores, Fedepalma, quien presidió ayer la reunión gremial en el Club Campestre, el mercado internacional ha tenido un repunte importante en los precios de los aceites y de otros commodities, ante la dinámica de la demanda de alimentos y de materias primas para otros usos.
Hoy, la tonelada de fruto maduro de palma se tasa a $400.000.“Durante mucho tiempo trabajamos con rangos de entre US$200 y US$700 por la tonelada de aceite en el mercado internacional; hoy los precios están del nivel de US$1.200 la tonelada.
Es extraordinario pero coyuntural y así como ocurrió hace dos años cuando estábamos a niveles como éstos, se cayó a US$400 dólares”, agregó.
Para Mesa Dishington, el sector es consciente y nuestra única realidad es la volatilidad de los precios. “La única garantía que tienen los productores para defenderse de la volatilidad es tener cultivos muy productivos”, agregó.