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La séptima reunión de la Comisión de Concertación Salarial no sirvió para suavizar las posiciones en procura de un acuerdo, sino para radicalizarlas más.
Pese a los intentos del ministro de la Protección Social, Mauricio Santa María, por lograr ayer una concertación entre empresarios y trabajadores para el incremento del salario mínimo del próximo año, las partes no se pusieron de acuerdo y en consecuencia el aumento será fijado por decreto, a más tardar el próximo jueves.
Al término de una reunión que duró un poco más de una hora, el secretario General de la Confederación General del Trabajo (CGT), Julio Roberto Gómez, dijo que queda en manos del Ejecutivo la fijación del salario mínimo y de su ajuste porcentual.
“Un 3 por ciento, equivalente a 515 pesos diarios, es una humillación para un trabajador que devenga el salario mínimo legal”, señaló el dirigente sindical, al explicar que el incremento de 30.900 pesos (que equivale al 6 por ciento propuesto por los trabajadores) no resolvía el problema de pobreza que sufre el país, pero era una cifra más ‘presentable’.
Gómez confió en que la posición del vicepresidente Angelino Garzón, quien afirmó que el 3 por ciento era una oferta demasiado baja e injusta, sirva para que la decisión del Gobierno supere la propuesta del sector empresarial.
Aunque tras la reunión los representantes del empresariado no dieron declaraciones, antes de la cita el presidente de la Sociedad de Agricultores de Colombia (SAC), Rafael Mejía, insistió en que un alza del 3 por ciento es una decisión económica y técnicamente viable, mientras que un porcentaje superior ya correspondería a una decisión política, que debe asumir el Gobierno.
Las cartas presentadas ayer fueron las mismas del pasado 15 de diciembre, cuando la CGT bajó sus pretensiones de 7 a 6 por ciento para un aumento de 30.900 pesos, mientras que los voceros de los empleadores no dieron su brazo a torcer y dejaron la propuesta en 15.450 pesos.
Para decretar el salario mínimo, que con esta ocasión completaría cinco años sin concertación, el parámetro principal que tendrá en cuenta el Gobierno es el costo de vida del 2010 y el esperado para el 2011.
Así mismo, el Ejecutivo analizará la productividad de la economía nacional, que según los cálculos de Planeación, cayó 0,4 por ciento este año.
Apuestas están entre 3% y 3,5%
Dos expertos en temas laborales hicieron sus previsiones sobre el aumento del salario mínimo. A Stefano Farné, de la Universidad Externado, un 3 por ciento no le parece ma- lo, pero, de pronto, por razones políticas, podría subir a 3,5 por ciento. Juan Carlos Guataquí, de la Universidad del Rosario, considera que estará entre 3 y 3,5 por ciento, aunque con tendencia hacia la primera cifra. Coinciden en que los efectos del invierno entrarán en las consideraciones del Gobierno.
