Fuente: https://www.portafolio.com.co/
Desde el primero de enero, los colombianos deben decirles a sus fondos de pensiones dónde poner su dinero.
Si usted es de los que están convencidos de que nunca se van a pensionar y por eso poco ahorran para ese propósito, al punto de que si trabajan como independientes cotizan sobre el mínimo para cumplir con el requisito o solo se limitan a pagar sus aportes de salud, los cambios en las pensiones, que comienzan en enero, lo harán cambiar de opinión.
Lo primero que debe tener en cuenta es que los colombianos cada vez viven más (en 1980 la expectativa de vida era 65 años, hoy va en 73) y por ende, cada vez tienen más posibilidades de llegar a la edad de jubilación y después vivir 20 o hasta 30 años más.
Otro factor es que si el mercado laboral actualmente ‘castiga’ a los mayores de 40, limitando sus posibilidades de emplearse, imagínese cómo será cuando usted, si es hombre, tenga más de 62 años o, si es mujer, supere los 57. Si bien estudios recientes demuestran que muchos colombianos tienen hijos con el objetivo de que estos los mantengan cuando lleguen a la vejez, esa estrategia ya no es muy efectiva.
Así que si su plan es no sumarse al 80 por ciento de colombianos mayores de 65 años que no reciben pensión, lo mejor es que empiece a ahorrar desde ya, aunque tenga 20 años y esté en su primer trabajo, o si ya tiene 45 y cree que no vale la pena.
Abecé de los cambios
En el país existen dos sistemas de ahorro para la vejez: uno público, que se conoce como régimen de prima media (cuyo emblema es el Seguro Social) y otro privado, denominado de ahorro individual (donde están los fondos de pensiones).
En el primero, que era el único que existía hasta 1994, todos los afiliados cotizan para una bolsa común y, cuando se jubilan, su mesada se la pagan con ese ahorro colectivo. Lo que se busca es que las cotizaciones de los jóvenes sirvan para pagar la pensión de los viejos (teoría que hoy no se aplica, pues al desfinanciarse el ISS, las pensiones se pagan con el presupuesto de la Nación). En el segundo sistema, cada trabajador ahorra lo que se va a gastar en su jubilación y por ende, entre más dinero guarde, mejor será su mesada.
La cantidad que se ahorra es un porcentaje fijo del salario (11,5 por ciento) en el sistema privado, pero además entra en juego otro factor que puede hacer rendir o mermar la cantidad que se está guardando: la rentabilidad de los activos en los que los seis fondos que operan en el país invierten la plata de sus afiliados.
Actualmente, nueve millones de colombianos tienen ahorrados 90,5 billones de pesos en los fondos de pensiones obligatorias, de ese monto, 33,7 billones corresponden a los aportes de los afiliados y 54,9 billones, a los rendimientos generados por las inversiones en acciones, títulos de deuda (en especial del Gobierno), en el exterior e incluso en vehículos de inversión que sirven para financiar la construcción de carreteras e infraestructura.
Aunque a primera vista esas cifras son positivas, como esta no es una bolsa común, sino un ahorro individual, se cambió la forma como se invierte el dinero de los afiliados, pues a todos no les sirve la misma estrategia, en particular en lo que atañe a las acciones, que, si bien son las más rentables, también son las más riesgosas. Por ejemplo, si a una persona le corresponde pensionarse cuando las acciones están a la baja, se le reduce la suma que luego le van a entregar y, por lo tanto, le tocaría una mesada más baja.
Lo conveniente
Para evitar ese riesgo, desde enero los afiliados deberán elegir cuál les conviene más. Las tres opciones son una conservadora, una moderada y otra arriesgada, y la principal diferencia está en el porcentaje que invierten en acciones.
En la primera, pensada para quienes están próximos a pensionarse, se destinará máximo 20 por ciento a acciones; en la segunda, para los que están en la parte intermedia de la vida (de 35 años en adelante), será máximo de 45 y en la tercera (pensada para los jóvenes), se permitirá hasta 70 por ciento (hoy los fondos en general invierten el 43,5 por ciento en acciones).
A partir del 1o. de enero del 2011 deberá decirle a su fondo dónde quiere poner su dinero.
Aunque se fijó esta fecha para iniciar la elección, no hay un límite, usted lo puede hacer en cualquier momento de su vida laboral y tiene la opción de cambiar de alternativa de inversión cada seis meses.
90billonesde pesos
Es lo que han ahorrado nueve millones de colombianos en los fondos de pensiones obligatorias. Gran parte de ese dinero son rendimientos generados por inversiones en acciones o títulos.
‘Tips’ para su pensión
Si bien todos los cotizantes son libres para elegir entre el fondo conservador, moderado o arriesgado, tenga en cuenta los siguientes factores:
Ojo con su edad
Quienes están cerca de la pensión (55 años, mujeres y 60, hombres –que está en régimen de transición– o 57, mujeres y 62, hombres para el resto) sí están obligados a meter todo su ahorro en el fondo conservador, justamente para protegerlo de los vaivenes de la bolsa.
Tolerancia al riesgo
Analice su capacidad para soportar períodos en los que la rentabilidad de su ahorro pensional sea negativa, pues los mercados financieros suben y bajan, por naturaleza. Si es joven, tiene tiempo para recuperar los rendimientos negativos, así que opte por el portafolio arriesgado. “Pero si le inquietan las caídas del mercado, busque el moderado”, sugieren expertos de Skandia.
Escuche a su asesor
Si no se siente en capacidad de elegir, haga uso de su fondo de pensiones, pues todos cuentan con asesores, que deben analizar su caso con detenimiento y recomendarle lo que más le convenga. “Si usted es pasivo, no se preocupe, la Ley lo guía y lo dejará en el portafolio moderado, hasta que llegue el momento de pasarse al conservador”, aconseja Porvenir.
Puede hacer cambios
Tenga en cuenta que usted se puede cambiar de alternativa de inversión cada seis meses, pero no puede dividir su ahorro entre las tres alternativas. Esto último únicamente está permitido para los prepensionados, que deben comenzar pasando el 20 por ciento de su ahorro a la alternativa moderada.
Si no ha cotizado
Si, como muchos colombianos, usted ha dejado de cotizar por temporadas, la recomendación de Colfondos es que si se es joven o de edad media, opte por el fondo de mayor riesgo, que se prevé será el más rentable y más riesgoso a la vez. Con la mayor rentabilidad se podría compensar la falta de cotización.
Analice la rentabilidad
Aunque en materia de inversiones la rentabilidad no está garantizada, como sí ocurre, por ejemplo, con un CDT, los cálculos de fondos como Skandia indican que la opción arriesgada, que tiene más inversiones en acciones, podría tener una rentabilidad 10 por ciento superior a la de la alternativa conservadora y 5 por ciento superior a la de la moderada.
Calcule el interés
Si tiene más de 35 años y los expertos le sugieren el fondo moderado, pero usted insiste en apostarle al arriesgado, recuerde que el desempeño de la bolsa no se puede garantizar. La diferencia entre las tres opciones está en lo que los financistas, como los de Protección, llaman el interés compuesto: por cada 100 puntos básicos de mejor rentabilidad durante la etapa de ahorro, al final podría obtenerse un capital 30 por ciento superior.
60por ciento de personas
Es la proporción de trabajadores colombianos que aportan para pensiones. En los seis fondos privados que existen en el país, el aporte es del 11,5 por ciento del salario.
22por ciento con pensión
En Colombia ese es el porcentaje de personas mayores de 60 años que ya reciben pensión. Según un estudio de la OIT, es más difícil pensionarse aquí que en 78 países.
Afiliados al ISS no tienen que escoger portafolio
Los afiliados a pensiones del Seguro Social no pueden ni están obligados a escoger uno de los tres portafolios (agresivo, moderado y conservador) para que les administren sus aportes, dada la naturaleza y características de funcionamiento del régimen de prima media con prestación definida.
Dicho régimen, a diferencia de las AFP, no administra cuentas individuales donde se consignan las cotizaciones pensionales de los trabajadores, sino que todos los recursos aportados por sus afiliados van a un fondo común de donde salen los dineros para pagar las mesadas de quienes se pensionan.
Las mesadas de los pensionados del ISS o cualquiera otra administradora del régimen de prima media no dependen de la rentabilidad de ese fondo común.
‘La mitad son menores de 35 años’
“El 56 por ciento de los afiliados a los fondos son menores de 34 años, el 38 por ciento está entre los 45 y 49, y cerca de 6 por ciento tienen más de 55 años. Tener reunidas en un único portafolio a personas con tan distintas perspectivas obliga a tomar decisiones de inversión subóptimas en materia de rentabilidad y duración de las inversiones de los portafolios”, afirma Mauricio Toro, presidente de Protección.