Fuente: www.portafolio.com.co
Un proyecto de ley radicado en la Cámara de Representantes pide que las entidades no se excedan en los cobros y que se fijen precios diferenciales.
Por segunda vez en cuatro años, una iniciativa promovida desde el Congreso busca controlar las tarifas que cobran las entidades financieras por la prestación de sus servicios. En esta oportunidad, se trata de un proyecto de ley, que radicó el representante a la Cámara David Barguil, a través del cual quiere ponerles un techo a los costos que cobran los bancos por sus diferentes servicios, como retiros, cuotas de manejo y uso de tarjetas, entre otros.
Según el congresista, la razón de ser de estas entidades son los créditos y por ello sus ingresos deben surgir de ahí y no de las transacciones que hacen los usuarios. Además, señala que, en la medida en que los servicios sean más baratos, aumentará el número de usuarios de la banca.
Si bien el tema de los costos financieros es uno de los que más ha impedido la bancarización de los colombianos (sólo 17,7 millones de personas mayores de edad tienen al menos un producto financiero), la Asociación Bancaria considera que no es conveniente controlar las tarifas.
La presidenta del gremio, María Mercedes Cuéllar, señala que “con todas las normas que han salido en los últimos años, hay una gran competencia de entidades financieras y esto es muy importante, pues la idea es que cada quien, de acuerdo con el enfoque de negocio, cobre por unos servicios y por otros no”. A esto, añade que la información sobre los costos está disponible para que cada usuario evalúe cuál es la entidad que más le conviene.
Barguil aclara que no se trata de fijar una tarifa, sino de definir límites. “Creo que el mercado debe funcionar, pero debería haber un techo de tarifas del cual no puedan pasarse, pues incluso existen bancos que no cobran por muchos de sus servicios”. No obstante, Cuéllar insiste en que el límite puede traer inconvenientes para el usuario, dado que “eso desestimula la competencia porque muchos tienden a pegarse al techo. Actualmente, hay tarifas distintas, pero al imponer un tope se corre el riesgo de que todos empiecen a cobrar lo mismo”.
Aumento en costos
El congresista asegura que “los bancos han fomentado el uso de Internet, a costa del uso de las oficinas físicas, lo cual debería llevar a que bajen los valores que se cobran a los usuarios, pero hemos visto que han subido”.
Esta situación es reconocida incluso por Asobancaria, pues señala en un informe que el año pasado hubo fuertes aumentos en los costos de servicios tradicionales, entre ellos los talonarios y los retiros por ventanilla o por volante, que tuvieron alzas cercanas al 20 por ciento.
El gremio dice que esto se produce como consecuencia de que los bancos quieren desestimular el uso de ciertos canales de operaciones, pues se trata de servicios costosos, por ejemplo mantener ventanillas para hacer retiros con talonario, pues esto causa congestión en las oficinas y genere la percepción de que el servicio es deficiente.
Por otra parte, Barguil propone que se establezcan tarifas preferenciales para las operaciones con montos mínimos. Esto, luego de un ejercicio en el que encontró que el mínimo para que no se reduzca el saldo en una cuenta de ahorro haciendo dos consultas de saldo, cinco retiros y tres pagos, son 19 millones de pesos, teniendo en cuenta además los bajos intereses que pagan las entidades.
“Somos conscientes de que un sistema financiero fuerte es importante, pero se necesita que existan mayores controles para impedir los abusos de algunas entidades, porque existen muchas disparidades”, puntualiza Barguil.
Comisiones son el 16% de los ingresos
Datos de la Superfinanciera señalan que, a julio, los ingresos que reciben las entidades diferentes de los que les entran por prestar, sumaron 18,1 billones de pesos, cifra que incluye a las cooperativas.
El grueso de estos recursos proviene de la valorización de sus inversiones, así como de las operaciones que hacen con instrumentos financieros en los mercados. Lo que reciben por las tarifas de los servicios financieros representa 16,8 por ciento de las entradas totales, equivalentes a 3,05 billones de pesos entre enero y julio de este año.
Por su parte, los ingresos por intereses de créditos sumaron 10,66 billones de pesos en ese lapso. Sin embargo, los cobros concentran parte de las inconformidades de los usuarios. El ente de control reveló que, el año pasado, 11 por ciento de las quejas estuvieron relacionadas con los cobros de servicios y comisiones.
Consulta de costos ya está disponible para usuarios
Cuando se usa cualquier servicio financiero -excepto los cajeros automáticos- son pocas las personas que saben si esa operación tiene costo.
Por ello, otro tema que está incluido en el proyecto de ley del representante David Barguil tiene que ver con la forma en que se presenta la información sobre las tarifas de los servicios. Busca que se obligue a que los extractos bancarios contengan cuadros informativos con los costos de los servicios. Además, pide que la Superfinanciera publique en medios de comunicación y en el Boletín del Consumidor un ránking con las entidades que prestan los servicios más baratos y los más costosos.
Desde hace varios años, la Superfinanciera tiene en su página web la información con los precios de todos los movimientos, consultas y demás operaciones que se pueden hacer con las entidades financieras, y permite que se comparen entre las distintas firmas. Pero además de que la información está disponible para cualquier usuario, ya existe también la obligación de que el ente de control revele de forma masiva las tarifas de los servicios.
Precisamente, el próximo primero de octubre entra en vigencia una disposición de la reforma financiera, aprobada a mediados del año pasado, según la cual “la Superfinanciera deberá publicar, trimestralmente, en periódicos nacionales y regionales de amplia circulación, y en forma comparada, el precio de todos los productos y servicios que las entidades vigiladas ofrezcan de manera masiva”.
Controles desestimulan la competencia: Asobancaria
¿Por qué no es conveniente limitar las tarifas que le cobran los bancos al usuario?
Independientemente de que no exista una tarifa fija, el asunto se convierte en un tema de presiones políticas en la negociación de cuáles deberían ser los topes, y eso es inconveniente. Además, con todas las normas que han salido en los últimos años, hay una gran competencia y esto es importante, pues la idea es que cada quien, de acuerdo con el enfoque de su negocio, cobre por unos servicios y por otros no. Que cada entidad incentive el uso de ciertos canales.
¿Pero podría establecerse un precio diferencial para las operaciones de bajo monto?
Todo son controles, en la medida en que se tenga que definir cuánto es lo máximo que se puede cobrar por un servicio, se va a presentar un problema, porque la gente tiende a pegarse al techo; actualmente, hay tarifas distintas y con eso se puede correr el riesgo de que todos le cobren lo mismo. Así no sea un control propiamente dicho, se desestimula la competencia, porque si el tope es amplio, los costos podrían aumentar.
¿Por qué se presentan aumentos en muchas tarifas de los servicios?
Los bancos se han volcado a hacer muchos desarrollos tecnológicos porque eso puede hacerle más fáciles las cosas al usuario, las inversiones son permanentes porque todo el tiempo hay que estar innovando y cambiando de equipos. El sistema financiero está orientado a aumentar la bancarización, por ejemplo vía banca móvil. Todos los días van apareciendo mecanismos y hay que cambiar para no desactualizarse.