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“Hemos visto que en el caso de la desgravación del 50 por ciento al total de las importaciones de materias primas y bienes de capital se generaría un sacrificio fiscal de 1,2 billones de pesos (0,2 por ciento del PIB), usando las cifras de recaudo de la Dian. Con ello se reduciría el arancel efectivo (implícito) del 5,6 por ciento al 3,9 por ciento”, afirmó el presidente de Anif, Sergio Clavijo.
El informe revela que si dicha desgravación se aplicara sólo a las importaciones de materias primas, el costo fiscal se reduciría a 630.000 millones de pesos (0,1 por ciento del PIB) y el arancel implícito caería al 4,7 por ciento.
Si la desgravación sólo se hiciera a las importaciones de bienes de capital, el costo fiscal sería de 570.000 millones de pesos (0,1 por ciento del PIB) y el arancel implícito llegaría al 4,8 por ciento.
“Anif opina que, en vez de recurrir a este complejo y costoso esquema, el Gobierno y el Banco de la República deberían lanzar una ofensiva para contener la apreciación cambiaria, utilizando de forma más agresiva el arsenal disponible”, agregó Clavijo.
El Gobierno sostiene que la reforma arancelaria le permitirá a los empresarios tener una mayor competitividad, renovar la maquinaria a menores costos y aumentar la demanda de dólares, lo cual ayudaría a contener la apreciación del peso.
“Esta semana habrá una reunión con el Consejo Superior de Comercio Exterior y el Comité AAA para poder entregarle una propuesta al público la semana entrante, para que comience a ser comentada, de manera de que antes de finalizar octubre tengamos la reforma ya lista”, afirmó el ministro de Comercio, Sergio Díaz-Granados.
El presidente de la junta Directiva de Inexmoda, Guillermo Valencia, se mostró inconforme con el estudio de Anif y señaló que la reforma es necesaria para evitar que aumente el desempleo en el país.
“Si nos ponemos a pensar en que las reformas afectan al fisco nunca vamos a hacer nada. La reforma ayudará a que los empresarios sean más competitivos y por ende vendan más, lo cual finalmente se traducirá en mayores contribuciones al Gobierno Nacional en el mediano plazo”, señaló Valencia.
Dentro de la reforma arancelaria, se tiene previsto impulsar el crecimiento de sectores como la agricultura y el turismo.
“Hay algunos bienes de capital y consumo que no son producidos en Colombia que son necesarios para el turismo y hay que utilizar la reforma en parte para estimular este tipo de sectores para que sean mucho más productivos”, agregó Díaz-Granados.
Reforma ayudará a los agricultores
En el desarrollo del Acuerdo de Prosperidad que realizó el fin de semana pasado el Gobierno en Ibagué, el Presidente Juan Manuel Santos, anunció que la reforma arancelaria incluirá rebajas para los insumos y productos agrícolas. En el mismo evento el ministro de Agricultura, Juan Camilo Restrepo, anunció que en 2011, esta cartera quintuplicará los subsidios de Vivienda de Interés Social Rural, subiéndolos de 30.000 millones de pesos a 150.000 millones de pesos.
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