Carlos Viáfara, docente de la Facultad de Ciencias Sociales y Económicas de la Universidad del Valle, comentó que “siempre en la historia de la economía ha habido una tasa natural de desempleo y no creo que sea tan grave el panorama de un dígito, pero sí se podría mejorar la tasa, sobretodo si hay una recuperación económica principalmente en los países desarrollados que son los que jalonan las importaciones de los emergentes. Así mismo mejoraría si los gobiernos facilitan la creación de empresas y empleo”.
Entre 2003 y 2012, el PIB de América Latina, creció a una tasa promedio anual de 3,7%, impulsado por la fuerte demanda de minerales y las exportaciones agrícolas, así como por el aumento de los precios internacionales de las materias primas, la disponibilidad de los flujos de capital y el aumento de la demanda interna. Durante este período, el crecimiento de la región incluso superó al de las economías avanzadas por más de dos puntos porcentuales, mientras que para 2015 se estima que el crecimiento de la economía regional se ubique debajo de las alzas en las economías avanzadas.
De acuerdo con el organismo internacional, esto se debe a varios factores, entre los que sobresalen la débil demanda agregada global, la caída de los precios de las materias primas, bajo crecimiento de la productividad e insuficiente inversión en infraestructuras.
Adicionalmente, la entidad señala que en América Latina existe una dinámica de producción y exportación que se concentra en sectores primarios, y este tipo de actividad económica no genera tanto empleo.
Martín Cáceres, docente de economía del Politécnico Grancolombiano, afirmó que la caída del petróleo afecta y seguirá perjudicando a países como Venezuela, Argentina, Ecuador y hasta el mismo Colombia donde varios proyectos de exploración se han visto afectados, lo que en consecuencia se debe de contrarrestar con la diversificación de la economía, especialmente para las dependientes del crudo como Venezuela.
Esteban Piedrahita, presidente de la Cámara de Comercio de Cali, dice que “la caída de los precios del crudo es conveniente para los países de Centroamérica y el Caribe, además de Chile, Uruguay y Paraguay, pues son importadores netos de petróleo. En el caso de Brasil y Perú, que producen más o menos lo que consumen, tampoco les afecta mucho”.
El Gobierno del presidente Juan Manuel Santos apunta a que la tasa de desempleo promedio para 2015 se ubique en 8,1%.
“Considero que la tasa en Colombia será muy estable, sobretodo por sectores como la infraestructura que han tomado dinamismo”, dice Cáceres.
Lo mismo piensa Piedrahita, quien agregó que “en el país no subiría el desempleo en este año, pues el petróleo tiene poco efecto sobre el empleo y muchos sectores del agro y la industria se beneficiarían de la devaluación”.
Panorama global
Más de 201 millones de personas estaban desempleadas a nivel global en 2014, 31 millones más que antes de la crisis global. En este sentido la OIT prevé que en 2015 los desempleados en el mundo aumenten en 3 millones de personas y lleguen a 212 millones durante los siguientes cuatro años, estimaciones que agrandarían la gran brecha laboral.
En las diferentes regiones, la perspectiva ha experimentado un cambio drástico. En el primer grupo conformado por economías avanzadas, la recuperación del empleo ha mostrado avances importantes y diferentes, y se prevé que la tendencia siga a la baja.
Por ejemplo, en 2014 Japón alcanzó un desempleo de 3,7% y Estados Unidos de 6,2%, mientras que en algunos países de Europa como Alemania (5%) y Francia (9,9%) el índice disminuyó pero a un ritmo lento.
Luego de un período de mejores resultados en comparación con la media global, la situación se está deteriorando en algunas economías de ingresos medianos y en desarrollo como América Latina, China, Rusia y algunos países árabes. En la mayoría de estas naciones, se prevé que el empleo informal se mantengan alto durante los próximos cinco años. En este punto, la OIT alerta de que en 2013, 46,8% de los trabajadores en la región fueron empleados informales, lo que representa una baja frente a la cifra de 52 % que se registró en 2005. Pero países como Perú (64%), México (53,8%) y Ecuador (49,3%) siguen alcanzando una alta penetración informal en sus esquemas laborales.
Hay 1.440 millones de trabajadores vulnerables
Las mejoras en el empleo vulnerable se han estancado en países emergentes. Se prevé que la incidencia de este tipo de empleo se mantenga constante en términos generales en torno a 45% del empleo total durante los próximos dos años. El número de trabajadores con empleos vulnerables en el mundo ha aumentado, y pasó de 27 millones en 2012 a 1.440 millones el año pasado. África y Asia registran más de la mitad del empleo vulnerable en el mundo. En este par de naciones la situación afecta a tres de cada cuatro trabajadores. Según la OIT, a finales de este decenio todavía uno de cada 14 trabajadores vivirá en condiciones de extrema pobreza.
tomado de:https://www.larepublica.co/seg%C3%BAn-la-oit-el-desempleo-en-la-regi%C3%B3n-subir%C3%A1-02-en-2015-y-llegar%C3%A1-68_211261