Para el próximo miércoles fue anunciado el primer debate oficial de la reforma tributaria en las comisiones terceras que sesionarán de manera conjunta, con la esperanza de iniciar el proceso de votación, teniendo en cuenta que el plazo para este trámite se vence el 5 de diciembre.
Sin embargo, la resistencia a que la reforma se convierta en ley este mismo año, empieza a crecer en el Congreso.
Inclusive, se habla hasta de rebelión de ponentes, pues el texto fue radicado con la firma de solo 3 senadores y de los 17 representantes que participan en Cámara, faltaron 4.
Además de la habitual oposición del Polo Democrático, que según Wilson Arias, "no solo se soporta en la brevedad del tiempo para el debate, sino en el contenido regresivo de la reforma", se suman otras.
El mismo presidente de la Comisión Tercera de Senado, Camilo Sánchez, coordinador de ponentes, ha manifestado su deseo de que el trámite del proyecto se aplace para la próxima legislatura, a fin de darle un debate más amplio.
Y no ha faltado el que pide una medida más drástica, como el archivamiento de la iniciativa.
Es el caso de Efraín Torres, representante a la Cámara por el partido de la U, quien envió una carta al Ministerio de Hacienda, argumentando: "he visto una reforma incoherente, con propuestas que han tenido que dar marcha atrás. Lo más responsable es retirarla y volverla a presentar el próximo año".
Entre tanto, el representante a la Cámara, Germán Varón, cursó ante el Ministerio de Hacienda un derecho de petición, para que le respondan 28 reparos que tiene a la iniciativa de cambiar el Estatuto Tributario.
ALGUNAS NOVEDADES DEL TEXTO AJUSTADO
Entre tanto, la ponencia entró con 155 artículos.
En ellos, hay reajustes, como el de un gravamen del 5 por ciento a la medicina prepagada, en vez del 16 que propuso el Gobierno.
El impuesto a la equidad, para compensar el desmonte de parafiscales y seguridad social en salud, quedó en 8 por ciento y no en 10 como pedían los congresistas. Restaurantes y pensiones onerosas quedaron sin tocar.
En cuanto al Impuesto Mínimo Alternativo (Iman), se deja la base de 3,3 millones de pesos sobre la cual se aplicará el gravamen, pero se corrige un tema de progresividad, pues ingresos entre 5 y 8 millones de pesos tuvieron un alivio en la tarifa que deberán pagar.
Tomado de: Portafolio.co