(Enter.co) La transformación en las empresas es uno de los retos a los que se enfrentan las organizaciones en la actualidad. Contar con nuevas tecnologías, facilitar los procesos y llegar a más personas, son varias de las tareas a cumplir para una verdadera transformación. Pues una de estas nuevas tecnologías es la facturación electrónica, la cual facilita el control financiero de empresas y clientes.
En el caso de Colombia, la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales de Colombia (Dian) solo ha acreditado a cinco empresas para brindar servicios de facturación electrónica. Una de ellas es Transfiriendo, empresa que bajo el concepto de ‘documento inteligente‘ desarrolló cuatro servicios para las compañías en vía de transformación. “La factura electrónica es una condición necesaria, pero no suficiente para la transformación digital. Y todas las herramientas que hemos creado permiten que la transformación se produzca mucho más rápido”, precisó Manuel Cabrera, presidente de Transfiriendo.
Un reciente informe de la consultora suiza Billentis señala que Colombia es uno de los países con mayores avances en la aplicación de la factura electrónica en América Latina. Al respecto, la firma Gosocket destaca que desde que la Dian anunció el nuevo rol que tendría la facturación electrónica, en el país aceleró el proceso de adaptación de la misma, equiparándose con países como Chile y Perú.
Beneficios para empresas y clientes
Contar con los servicios de la facturación electrónica, tiene beneficios para las empresas y para sus clientes. En primera instancia, las empresas reducen los costos en papel y le brinda mayor agilidad comercial. En el caso de una empresa de consumo masivo, la facturación electrónica le permite implementar la agenda de cobranza. Además, le facilita el proceso de otros documentos como cotizaciones, órdenes de compra y de entrega.
Y por su parte, los clientes reciben en un solo buzón todos sus documentos digitales. Este buzón puede ser su WhatsApp, correo, redes sociales, entre otros. Esto les permitirá tener más controladas sus cuentas, tener claro dónde almacenan sus documentos y en qué invierten sus ingresos.
Facturación electrónica en Colombia
“Colombia es uno de los países que más se ha demorado en implementarla. Nosotros tenemos experiencias en Chile, Argentina, Ecuador y creo que es una necesidad. Y se aplica a todos los sectores. Por ejemplo, en Chile y Argentina, la factura electrónica tiene que ser emitida hasta por un profesional independiente“, resaltó Cabrera.
Y es que en el país, según Transfiriendo, hubo un primer intento de implementación hace cinco años. Sin embargo, en ese entonces se le exigía al receptor que realizara unos trámites innecesarios en el modo convencional.
Actualmente que se superaron las barreras de la tramitología, la facturación electrónica se perfila como una herramienta de crecimiento. No solo por ahorrar costos en el proceso, sino está la factura electrónica como título valor que permite a las empresas tener mayor liquidez.