Durante las jornadas laborales pueden presentarse varias situaciones que lo pueden poner “contra de la espada y la pared” y que pueden influir en su productividad, el clima laboral y hasta en la forma en la que usted hace su trabajo.
En el caso más reciente, “Sepp” Blatter tenía una situación muy evidente frente a él sobre la institución que estaba dirigiendo: una fuerte crisis de corrupción y, con ello, la pérdida de credibilidad en la FIFA. Y si él era quien estaba a la cabeza, por lo tanto, gran parte de esa crisis era su responsabilidad.
Esas son algunas reflexiones del experto e influenciador en LinkedIn, Greg Weiss, quien destaca la importancia de la transparencia en una marca. Y a pesar de todo lo que estaba en su contra, Blatter fue reelecto.
Y luego, con mayor sorpresa, tan sólo cuatro días después anuncia su renuncia afirmando un “amor por la FIFA” y que “era lo mejor”. Aunque analistas en Semana aseguran que, detrás de esto, hubo una presión mayor.
Sea cual sea la situación, siempre es bueno determinar, como empleado, cuándo es el momento más oportuno para decir “adiós” o renunciar, luego de que se presenten situaciones en su contra, como las siguientes:
• Cuando ha cometido un error muy grande que lleve a la empresa a grandes pérdidas
Esto puede presentarse desde varias perspectivas: desde el hecho de que no supo cerrar un negocio como correspondía, como cuando no realizó una inversión en un momento oportuno, hasta cuando no tuvo las suficientes precauciones de seguridad para proteger alguna información sensible.
Esto, especialmente, porque se traduce en una irresponsabilidad con su trabajo, con el crecimiento de su empresa y, especialmente, una falta de atención a las prioridades que, muy seguramente, le habrán sido comunicadas en reuniones o desde que inició su trabajo.
Así, no haber logrado asumir el compromiso de la forma que le había sido asignado y que le implique a la empresa altas pérdidas, es una señal de que es necesario revisar lo que le está sucediendo en su carrera o desempeño profesional.
Sin embargo, siempre hay otras opciones y oportunidades, incluso, dentro de la misma compañía. Quizá usted puede enmendar su error hablando con sus superiores y ofreciendo soluciones para superar los inconvenientes.
• Si usted dañó su reputación y ello afecta la imagen de la empresa
Quizás por un descuido en una fiesta social o por la forma en la que usted trata alguna persona, puede ser visto de manera distinta y, con ello, afectar su reputación. Esto sucede especialmente con situaciones que, luego de ocurridas, lo hicieran ver como una persona poco ética o transparente.
Se trata de una situación que influye, sobre todo, en personas que se desempeñan en áreas comerciales o de negocios, pues ya ha generado algo que ha hecho perder la credibilidad en usted y, muy seguramente también en su desempeño como funcionario de la empresa para la cual trabaja.
El sitio web Tesh también señala que otro ejemplo de esto es cuando usted reacciona mal ante el miedo o el estrés y muestra actitudes que no son coherentes con las directrices de la empresa. Si ha ocurrido alguna crisis que afrontó con llanto o rabia, especialmente cuando habían terceros involucrados.
• Cuando no asumió sus responsabilidades cuando le correspondía
Si cometió algún error pero no fue capaz de decir “fue mi culpa” y esta escena ha ocurrido varias veces, muy probablemente su jefe está esperando a que suceda nuevamente, para darle la noticia de su despido. Incluso, puede ser aún peor cuando usted culpa a alguien más o intenta encubrir lo sucedido, según explica un artículo de Money, de US News.
Este error también se puede evitar fácilmente, pero hay que saberlo hacer a tiempo. Especialmente porque si llega a darse una situación de investigación o seguimiento para rastrear quién cometió el error y detectan que fue usted, y no lo asumió, su reputación como profesional también se verá comprometida.
• Cuando se toma las situaciones muy personales
Esto está especialmente relacionado con un tema de confianza y de relaciones laborales. Uno de los casos más evidentes es cuando estableció un noviazgo o relación amorosa y, al terminar, el ambiente laboral puede cambiar por completo al punto de que se convierte en algo insoportable.
Pero también puede suceder cuando se siente traicionado por algún compañero de trabajo o la relación con su jefe se complica.
Así, cuando es difícil separar las situaciones personales de las profesionales, lo mejor es darse un respiro y emprender la búsqueda de un nuevo lugar de trabajo que le permita superar la situación más fácilmente sin afectar las actividades de la empresa para la que trabaja.
tomado de:https://www.finanzaspersonales.com.co/trabajo-y-educacion/articulo/momentos-debe-reconocer-mejor-renunciar/56486