Fuente: https://www.larepublica.co/analisis/simon-gaviria-munoz-401830/tributaria-simplificada-3214615
Una versión más sencilla de 35 artículos con 14 temas de fondo, consigue $15 billones. Esta nueva versión simplificada no es estructural ni pretende serlo. Es el resultado de lo posible, haciendo lo necesario para mantener la viabilidad financiera. Quedan pendientes por lo menos $9 billones anuales por conseguir. Con ajustes al texto propuesto, es una reforma que se debe apoyar. Historia diferente serán las proposiciones del Congreso, donde los temas sin consenso se irán a voto limpio. Todavía queda mucha tela por cortar, la reforma no saldrá como fue presentada.
La normalización propuesta es útil, ya que consigue recursos sin aumentar tasas. Permite que los bienes no declarados puedan ser formalizados pagando 17% de su valor. Aunque este esquema pierde eficacia por la alta tarifa, pues usualmente el pago es menor a 10%, los recursos son necesarios. Sí cabe la reflexión sobre si tantas normalizaciones les hacen perder fuerza, generando incentivos negativos de recaudo. Estas son para crisis como en la que estamos, no para todo el tiempo.
Fijar la tarifa de renta en 35% para personas jurídicas es una propuesta presentada por la Andi con el propósito de defender la estabilidad macroeconómica. La sobretasa de 3% del impuesto de renta para el sector financiero se mantiene. No cobrar retención en los TES busca atraer inversión, disminuyendo el costo de la deuda nacional tras perder el grado de inversión. La retención existente es redundante ya que el extranjero no paga impuestos de renta en Colombia. Deducir 50% del pago de ICA, aunque acertado, es incompleto. No se debería dejar deducir nada de ese tributo, esto significaría $1,8 billones adicionales de recaudo.
En materia de gasto la reforma ayuda a financiar programas que, aunque son temporales, no tiene sentido social acabarlos, como Ingreso Solidario o el Paef. La mejor focalización a partir de 2022 del Ingreso Solidario es un gran aporte. Adicionalmente, fondear nuevas iniciativas como Matricula Cero, el apoyo a nuevos empleos y financiar transporte público tiene mucho sentido. Desafortunadamente, la buena idea de la reforma anterior, que los subsidios usen doble filtro de Sisben y estrato, no fue incluida.
Las medidas de austeridad introducidas no tienen que ir en la ley, pero mandan el mensaje correcto. Las facultades de suprimir o fusionar entidades son demasiado vagas para ser aprobadas por el Congreso. Si el Gobierno tiene ideas, debería presentar un proyecto de ley específico. En materia de regla fiscal se incluye un limite de deuda para el país. Se corrige el error de los últimos años de financiar gasto recurrente con ingresos temporales. Pensar que BanRepública siempre va a dar utilidades es una equivocación.
Con un texto sencillo, la reforma tributaria que se presenta debe ser aprobada. El ministro Restrepo generó un consenso en un mar de polarización. Lástima que los impuestos ambientales no clasificaron. Tampoco se desmontan los privilegios sectoriales creados por las últimas tributarias. No se corrige la baja contribución de renta de personas naturales de altos ingresos. No se resuelve la discriminación contra el comercio nacional a favor del e-commerce internacional. En año electoral será difícil que temas complejos no entren al debate a través de proposiciones.