(Dinero) Posterior a las grandes dificultades de las exportaciones de los últimos cuatro años, este 2017 luce esperanzador para las ventas colombianas al exterior. ¿Qué tanto se recuperará Colombia este año y a qué factores se le podría atribuir?

Durante el periodo 2012 y 2016, el valor en dólares de las exportaciones colombianas sufrió una contracción superior al 46%. Según una reciente investigación de Fedesarrollo, este comportamiento fue similar al ocurrido en los peores periodos de la historia económica de Colombia, tales como la gran depresión (1928-1932) y la guerra de los mil días (1898-1902).

 

“El desplome de las ventas externas se explica fundamentalmente por factores que no se encuentran bajo el control del país o sus autoridades”, destaca la entidad. La anterior afirmación se argumenta por dos factores:

La drástica caída en los precios internacionales del petróleo y carbón, que en dicho periodo se redujeron 54% y 31% respectivamente y; la recesión de la economía venezolana y el mal comportamiento generalizado de las economías latinoamericanas que hizo que también cayeran las exportaciones manufactureras y de productos agropecuarios que tradicionalmente llegaban a esos destinos.

Teniendo en cuenta lo acontecido, las exportaciones totales del país pasaron de US$60.100 millones en 2012 a US$31.100 millones en 2016. Si esto se plantea de acuerdo al tamaño de la economía, el país pasó de exportar el equivalente a cerca de 20% del producto interno bruto (PIB) en 2012 a poco más de 10% en 2016.

A pesar de la contracción en las importaciones por la depreciación del peso y por la desaceleración en el crecimiento de la demanda, la balanza comercial pasó de presentar un superávit de US$5.000 millones a ser deficitaria en US$10.300 millones.

 

¿Se vislumbran tiempos de recuperación?

Pese a que el valor de las exportaciones en 2016 disminuyó en US$4.617 millones frente a 2015, en lo corrido de este año comenzó a observarse una recuperación en las ventas externas de todos los bienes. Las razones:

  • El incremento en el precio del petróleo que empezó a observarse hacia el mes de marzo de 2016 y que se consolidó tras el acuerdo de la Opep en noviembre.
  • El valor de las exportaciones de carbón empezó a recuperarse desde mediados del año 2016 por una combinación de mayores precios internacionales y volúmenes exportados.
  • Recuperación de las exportaciones no tradicionales, cuyo valor empezó a incrementar en la segunda mitad del año (llegando a 15,3% en el trimestre noviembre-enero).

¿Cómo empezaron el año?

En enero, las exportaciones colombianas presentaron un incremento de 39,9% con respecto al mismo mes de 2016.

Según cifras del Dane y la Dian las exportaciones pasaron de US$1.869 millones en enero de 2016 a US$2.614,4 millones en enero de 2017. Posteriormente, febrero arrojó de nuevo un crecimiento de las ventas al exterior.

 

En febrero, las exportaciones presentaron un incremento de 15,8% con respecto al mismo mes de 2016, pasando de US$2.297,7 millones a US$2.659,8 millones.

Entre enero y febrero, se registró un crecimiento de 27,9%, exportando US$1.161 millones más que en el mismo periodo del año anterior. Este comportamiento estuvo jalonado por el incremento de las ventas externas de combustibles (40,5% en febrero).

Cabe resaltar que la Asociación Colombiana de Petróleo (ACP) anunció que en 2017 su presupuesto de inversión sería de US$3.000 millones, muy superior al de los dos años previos. Sin embargo, la producción se mantendría en 865.000 barriles diarios.

De noviembre 2016 a enero 2017, las ventas externas no tradicionales presentaron en conjunto un desempeño positivo, donde se destaca un fortalecimiento del dinamismo de las ventas a Ecuador, México y a la Unión Europea.

Fedesarrollo espera que para los siguientes meses la recuperación de las exportaciones continúe y que finalicen el año con un crecimiento de aproximadamente 16%. Además de la recuperación de los precios internacionales del petróleo, se proyecta una expansión anual de 6% en las exportaciones no tradicionales.

Finalmente, la entidad destaca que si se quiere dar un verdadero impulso a las exportaciones hay que reducir los problemas estructurales actuales como: los costos de transporte interno, la logística del comercio exterior y el proteccionismo sobre las importaciones agropecuarias.