Si tomamos el emprendimiento, no solo como el proceso de crear empresa, ya que esta es solo una manifestación, sino que consideramos que una persona puede ser emprendedora sin necesidad de ser empresaria, y tomamos la definición de la RAE vemos que emprender es: "Acometer y comenzar una obra, un negocio, un empeño, especialmente si encierran dificultad o peligro".

Siendo así, las competencias emprendedoras tienen que ver entonces con identificar oportunidades, tener una visión global, pensamiento sistémico, y una serie de características importantes para cualquier fase de la vida (independiente de crear o no empresa).

A mayores competencias, habilidades, destrezas, características con las que cuenta una persona para acceder a un empleo, independiente del cargo al que aplica, mayor es su nivel de empleabilidad, es decir, las capacidades y habilidades que incrementan la posibilidad de obtener un empleo.

En muchas organizaciones, cuando se realizan procesos de selección de personal, se detecta la ausencia de ciertas características en los aspirantes al cargo que dificultan tal proceso, aspectos relacionados con los hábitos, comportamientos, actitud hacia la vida, competencias emprendedoras.

Competencias emprendedoras

Éstas están más allá del conocimiento técnico, pues si se encuentra una persona con potencial, las empresas procuran capacitarla, pero la forma cómo se aplican esos conocimientos técnicos y las competencias que lo acompañan es lo que incrementa la empleabilidad de la persona.

Considero que las competencias emprendedoras están íntimamente ligadas a la empleabilidad. Creo que alguien que está buscando empleo, y en su formación académica desarrolló competencias emprendedoras, si no es su decisión crear empresa, sus atributos van a incrementar su nivel de empleabilidad.

Hoy las compañías requieren personas que además de tener determinada profesión, aporten nuevas soluciones a los problemas existentes, tengan diferentes formas de hacer las cosas, busquen cómo agregar valor a la organización a la cual sirven, pues sin importar qué tan grande o pequeño sea su aporte lo que deba desarrollar lo hace como si fuera su propia empresa.

En ocasiones, desde el momento en que se realiza la entrevista para emplear a alguien, se encuentra a un ser que no transmite pasión, que no hace una buena venta de sí mismo como empresa y esta actitud no convence al posible contratante.

Eso explica también por qué unas personas ascienden más fácil que otras o permanecen más tiempo en las empresas. Estoy convencida de que más allá de hacer el trabajo para el cual se le contrató, la persona con altos niveles de empleabilidad es alguien que hace propuestas, aporta, piensa, investiga y hace más de lo que se le pide.

El fomento del emprendimiento debe incrementar el nivel de empleabilidad. Por eso es importante que las universidades fomenten las capacidades emprendedoras y así incrementar el nivel de empleabilidad de sus profesionales. Pero más allá del contexto académico quiero invitar a los lectores a la reflexión y a la acción: Está usted dispuesto a tener una actitud emprendedora y subir su nivel de empleabilidad?

tomado de:https://www.finanzaspersonales.com.co/columnistas/articulo/como-actitud-emprendedora-influye-hora-buscar-trabajo/56263