(Finanzas Personales) La propuesta de la Asociación Nacional de Instituciones Financieras (ANIF) sobre aumentar la base del IVA a productos que no sean de la canasta familiar abrió el debate. Estos serían los incrementos más importantes.

Más de uno está sacando las cuentas del otro año (porque el 2018 digámoslo así ‘ya prácticamente se terminó’) y debe estar con sus apuntes en mano, cuadrando las cifras de cómo manejará sus finanzas. ¿Será que ya incluyó todo: los servicios, arriendos, la alimentación, las inversiones, el ahorro y, cómo no, los impuestos?

Piénselo muy bien porque de pronto no está teniendo en cuenta la reciente polémica que suscitó la propuesta de la ANIF sobre incrementar la base que paga el IVA. Para el centro de estudios económicos, el país está necesitando de recursos para mejorar su crecimiento, pues hoy está en solo 3% y su ritmo ideal debería llegar al menos 4,5%. Eso se logra con más inversión y para ello, se necesita capital, mejor dicho, dinero. ¿De dónde saldría el dinero? Pues amigos, del bolsillo suyo y de todos los colombianos. Hasta FP tendría que poner en esta dolorosa vaca.

Imagínese ese susto si ello se llega a concretar y lo más probable es que sea así porque el reciente gobierno del presidente Iván Duque, a través de su ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, ya empezó a dejar pistas de una próxima reforma tributaria, cuando la que se aprobó recientemente (en diciembre de 2016) incrementó los impuestos que pagamos los colombianos (Se pasó del 16% al 19% en el IVA; se gravó con IVA a los planes de celular, el monotributo e imporrenta a los dividendos, por ejemplo).

Al revisar algunos servicios y productos que no tienen IVA o que el IVA es de 5%, que además no pertenecen a los productos básicos de la canasta familiar, se observa que algunos procedimientos de salud se incrementan, los libros y cuadernos de colegio suben, lo mismo que seguros para automóviles, el transporte en taxi, bus o servicio intermunicipal, entre otros. Las diferencias se las explicamos en el siguiente gráfico.

La explicación de ANIF

De acuerdo con Sergio Clavijo, presidente de ANIF, el recaudo en Colombia viene aumentando pero sigue siendo inferior al del promedio de la región. Sin embargo, el IVA también creció en participación respecto al PIB, al pasar de 4,9% en 2016 al 5,5% en 2017. Y eso se logró al pasar de un IVA de 16% al 19% que aprobó la Ley 1819 de 2016, la Reforma Tributaria Estructural.

De esta forma, a nivel agregado, la canasta total de bienes gravados con IVA sufrió un incremento en su tasa efectiva del 14.8% del año 2013 hacia el 17.9% en 2017. “Al analizar por tipo de bienes dicha nueva tasa efectiva del IVA, encontramos que: i) los bienes de capital quedaron gravados a tasas efectivas promedio (simple) del 18.7%; ii) los bienes de consumo alcanzaron tasas efectivas promedio del 17.8%; y iii) los bienes intermedios quedaron gravados a tasas efectivas promedio del 16.5%”, señala.

Con respecto a la canasta de consumo básico de los hogares en Colombia (definida por el Dane), la aplicación de dicha Ley 1819 de 2016 implicó que cerca del 30% de esos bienes básicos se viera afectado al subir la tasa general del IVA del 16% hacia el 19%. No obstante, ese mayor costo se vio compensando con el hecho de haber mantenido cerca del 35% de esa canasta básica con tratamiento preferencial en tasas del IVA al 5%.

Este tanque de pensamiento explicó que también cabe recordar que dicha Ley no intentó incrementar la cobertura del IVA respecto de los bienes y servicios de la canasta básica (lo cual ANIF consideró acertado). De esta manera, el restante 35% de la canasta básica continuó totalmente exento. Lo anterior implicó que la tasa efectiva promedio del IVA para la canasta básica en Colombia se elevó apenas marginalmente, pasando del 6.4% hacia un 7.3%, como resultado de la mencionada Reforma de 2016.

“Para ANIF, se debe intentar llevar la tasa de IVA de 19% a aquellos bienes y servicios que están al 0% o al 5% (acercando la tasa efectiva a la tasa nominal), siendo la única excepción aquellos productos que forman parte de la canasta básica”, manifestó.

Esto implica que se mantendrían solo las tres tasas vigentes del 0%, el 5% y el 19% y las únicas excepciones a la tasa del 19% serían los bienes y servicios que hoy tienen tratamiento especial dentro de la canasta básica, correspondiente al 70% de dicha canasta. “Así, una reforma que ajuste la estructura del IVA en la dirección aquí señalada estaría allegando tributación adicional por cerca del 0.4% del PIB durante 2019-2022. Nótese que esta cifra de recaudo adicional equivale a la mitad de lo logrado con el incremento de la tasa general, al pasar del 16% al 19%. Claramente, esta no es una ganancia en recaudo que se pueda despreciar, dadas las afugias fiscales de Colombia”, dice el documento.

La entidad asegura que para mitigar el efecto regresivo que se genera en la canasta básica por cuenta del incremento de la tasa del 16% al 19% en la porción del 30% de dicha canasta, propone destinar un 0.2% del PIB para gasto social adicional en Familias en Acción.

“Todo lo anterior implica que la ganancia en recaudo neto del IVA vendría a ser del 0.2% del PIB (= 0.4% ganado al ajustar tarifas del 0% y el 5% al 19% - 0.2% del PIB destinado a Familias en Acción). No creemos que montar mecanismos de devolución del IVA para los estratos bajos sea una buena política en Colombia, pues los esquemas alternativos de compensación directa a los consumidores de dichos estratos (como ocurre en Uruguay) resultarían en extremo costosos y proclives a la corrupción”, concluye la propuesta.

Obtenido de: Finanzas Personales