La Sociedad de Agricultores de Colombia –SAC- reconoce el esfuerzo del Gobierno por impulsar una Reforma Tributaria que ha considerado necesaria para eliminar la desigualdad y acabar con la informalidad en el país.
El gremio de gremi
os respalda las nuevas condiciones de la Reforma y admite la efectividad de Gobierno y Congreso de incorporar modificaciones en beneficio del sector agropecuario.
La Reforma hace ajustes importantes en la reducción del IVA y la eliminación de la tarifa en bienes y materias primas, importantes para el sector agropecuario, así como en productos de la canasta familiar, favoreciendo a los colombianos de menores ingresos.
Otro elemento que para el sector agropecuario resulta fundamental, es la eliminación de los parafiscales y la creación del Impuesto para la Equidad –CREE- con la correspondiente garantía de conservación del Sena y el ICBF.
"Respaldamos lo expresado por el presidente de la República, Juan Manuel Santos Calderón, de preservar la estructura tripartita del Sena y el ICBF, así como la autonomía en su operación", dice el presidente de la SAC, Rafael Mejía López.
Agrega que "la medida acompañada de otras herramientas, es el camino adecuado para promover la formalización del empleo en el sector rural, que hoy presenta indicadores de informalidad y de pobreza que deben ser superados".
En ese sentido, Mejía López señala que salvo algunos ajustes pendientes que faltan por hacer a la reforma, "consideramos que va por el camino adecuado en el sentido de cerrar la brecha y la inequidad entre el sector urbano y rural que existe en nuestro país".
Así mismo, el presidente de la Asociación Colombiana de Exportadores de Flores, Asocolflores, Augusto Solano Mejía, manifiesta el respaldo del gremio floricultor a la propuesta de Reforma Tributaria presentada por el Gobierno.
El dirigente gremial precisa que "la economía colombiana ha tenido un cambio estructural significativo, evolucionando hacia una economía fundamentalmente minero-petrolera. Esta transformación tiene serias implicaciones sobre la competitividad laboral del país y sobre la generación de empleo, en un momento en donde Colombia se abre cada vez más al comercio internacional a través de los TLC".
Solano Mejía explica que el país requiere de medidas estructurales que ayuden a mitigar el efecto de la enfermedad holandesa, especialmente en las actividades intensivas en mano de obra, la cual se ha encarecido por la revaluación.
Coincide en que la reducción de los parafiscales para los empresarios contemplada en la Reforma Tributaria, es la única medida estructural en este sentido y que puede ejecutarse ahora gracias al incremento de los recursos fiscales, producto de la bonanza minero-petrolera. Además, el Gobierno ha garantizado recursos suficientes para el adecuado funcionamiento del Sena y del ICBF.
De otra parte, el presidente de Asocolflores agrega que "hasta hace poco los buenos precios de muchos productos agrícolas permitieron sobrellevar el proceso revaluacionista en el país. El debilitamiento de estos preciso amenaza el empleo agrícola y de las actividades intensivas en mano de obra".
Solano concluye que "Colombia sigue siendo un país con altísima informalidad, la Reforma Tributaría facilitaría la formalización del empleo, y evitaría que los empresarios que generan trabajo formal tengan que reducir sus plantas de personal. De otra parte, una política pública responsable debe tener presente que los recursos de la bonanza minero-petrolera se pueden agotar, y por lo tanto, debemos evitar que el país se desindustrialice y pierda los empleos actuales".
Tomado de: dinero.com