A pesar de toda la incertidumbre frente al proceso de paz, por mas de haber sido un año de campañas electorales, donde normalmente se frena la economía, nuestro desempeño es hoy el mejor de América Latina, por encima de importantes y sólidas economías como Chile, Brasil y México.

El sector de la construcción ha sido el protagonista mas importante de estos resultados, lo cual es muy positivo para el país, debido a que este sector demanda gran cantidad de mano de obra. Esto se traduce no solo en incremento del PIB, sino también en una mejor distribuición de la riqueza.

Hay que tener presente que no ganamos nada con un mayor PIB en un entorno de inequidad y miseria. Es importante que el gobierno reelecto combata la corrupción, fomente la educación, promueva la inversión social y flexibilice el empleo. Solo así podremos hablar en un futuro, no solamente de ser el país con mayor creciemiento del PIB, sino también llegar a ser la nación con el menor coeficiente Gini, es decir, un país con una excelente distribución de ingreso.

Los leves incrementos en la tasa de intermediación presagiaban estos resultados. Cuando una economía crece de manera importante, los bancos centrales incrementan la tasa de interés del emisor, con el propósito de moderar dicho crecimiento y prevenir brotes inflacionarios.

Las tasas de interés comenzarán en los proximos meses a incrementarse levemente, pero esto no debe de alarmarnos, por el contrario generará estabilidad al crecimiento en el largo plazo.

El alto incremento del PIB beneficiará de manera trascendental a la economía del país. Fortalecerá nuestra imagen ante los agentes internacionales y nos consolidará por mas tiempo como uno de los destinos de inversión mas importantes a nivel mundial. Los beneficios llegarán a todos los colombianos, en términos de mayores fuentes de empleo, mejor capacidad de pago, mayor consumo y mejores expectativas a todo nivel.

El excelente clima de inversión con que hoy cuenta Colombia, favorecerá las proyecciones de las empresas en términos de precios y cantidades. Esto generará un impacto positivo sobre los flujos de caja proyectados y aumentará el valor de las empresas. Es un momento propicio para emprender negocios, para vender y comprar compañias, para realizar alianzas y para concretar proyectos.

Tomado de: https://www.portafolio.co/opinion/blogs/valoracion-empresas/el-incremente-del-pib-y-el-valor-las-empresas