En 2012, el Producto Interno Bruto. PIB, creció 4 por ciento, una cifra que para algunos sectores fue pobre y para otros aceptable. Para este año el Gobierno cree que el Producto crecerá 4,8 por ciento. Lo que no se ha explicado es si esta meta es contando con el PIPE o no.

 

El optimismo del Gobierno por el PIPE, se establece en que como se van a generar 350 empleos adicionales, la población va a tener una mayor liquidez y capacidad de compra, con lo que se reactivaría el comercio y la industria.

 

El Ministro de Comercio, Industria y Turismo, Sergio Díaz-Granados, al explicar las medidas transversales y sectoriales del PIPE, dijo que en el Plan están comprometidos recursos del Gobierno por cerca de cinco billones de pesos, y que ésta es una disposición integral que incluye medidas arancelarias, tributarias, aduaneras y financieras.

 

Dentro de las medidas figura el aumento de 5 mil millones de dólares en ahorro de moneda extranjera, adicional a acumulación prevista de reservas internacionales que hasta mayo se proyecta en 3 mil millones de dólares.

 

Asimismo, en materia tributaria, anticipo de 2 meses a la eliminación de parafiscales (Bienestar Familiar y SENA), de tal manera que comience el próximo 1º de mayo.

 

En materia arancelaria, se establece el mantenimiento por 2 años de la política de cero arancel para 3.094 partidas arancelarias de bienes de capital y materias primas no producidas en el país.

 

También habrá reducción en los costos en logística para mejorar la competitividad de las empresas.

 

Con el PIPE, el Gobierno alberga la esperanza que la cruzada contra el contrabando dé resultados, con lo que se controlaría uno de los principales males del desempeño industrial.

 

En este mismo sentido, el Gobierno se comprometió a establecer créditos a tasas preferenciales destinados a repotenciar las industrias nacionales.

 

Con estas medidas, el objetivo de incrementar el crecimiento del PIB en 1 por ciento no sería irreal. Sin embargo, la duda de este panorama es que de verdad se cumpla con todos los pasos dispuestos por el Plan. No debemos olvidar que Colombia es un país de normas, planes y leyes, pero hacerlas cumplir es otro reto.

Tomado de: elnuevosiglo.com.co