Se acerca el 14 de febrero, día en que se cierra uno de los hechos económicos más importantes en el comienzo del año en Colombia, pues, por disposición legal, todos los empleadores deben consignarles las cesantías a sus trabajadores.

De no hacerlo oportunamente, se exponen a una sanción de un día de salario por cada día de retraso.

El último trimestre de 2011 la tasa de desempleo en Colombia llegó a niveles históricos que no se veían hace cerca de 10 años y se ubicó en 9,7% según datos del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane). No obstante, más de 2 millones de colombianos están sin empleo y perder el trabajo sigue siendo una posibilidad.

Precisamente para cubrir la contingencia de quedar cesante se crearon las cesantías como una prestación social en el país. Adicionalmente, las normas han extendido su alcance a otros usos como la adquisición y mejora de vivienda y el pago de educación superior propia, del cónyuge y los hijos.

De acuerdo con las proyecciones de la industria, se estima que cerca de 7 millones de trabajadores colombianos recibirán la consignación de cesantías en 2012.

El sistema espera un crecimiento del 10% de los aportes de esta prestación social, generado especialmente por incremento del salario mínimo y del número de trabajadores formales, lo que significaría un recaudo de $2.6 billones aproximadamente, según Asociación Colombiana de Administradoras de Fondos de Pensiones y Cesantías (Asofondos).

Si una persona tiene un contrato laboral, recibe por cada año de servicio un mes de salario o proporcional al tiempo laborado como cesantías. Desde su existencia, esta prestación ha mostrado su efectividad, pues, según datos de Asofondos, en diez años, 2001 – 2011, los trabajadores colombianos cubrieron sus necesidades de educación, vivienda y desempleo con $18 billones provenientes de las cesantías. Más recientemente, en promedio, durante los años 2010 y 2011, del total de los retiros mensuales, un 44% se destinó a gastos asociados a vivienda; 32% para protección del empleado por desvinculación laboral; y cerca de un 8% para fines educativos.

Frente a este panorama, hoy la Administradora de Fondos de Pensiones y Cesantías Protección tiene como principal estrategia acompañar a los afiliados para generar en ellos una cultura que permita que las cesantías sean vistas como un ahorro para el futuro, el capital perfecto para cumplir los sueños de tener casa propia o estudiar y la mejor forma de conservar su estabilidad económica en caso de desempleo.

Por eso ofrece herramientas de educación como la charla virtual en www.proteccion.com, además de la asesoría en todos sus canales de atención.

Adicionalmente, para los empleadores, Protección pone a disposición medios de liquidación y pago que les faciliten realizar estos trámites sin salir de la oficina, haciendo uso de herramientas virtuales a través de su página Web.

La invitación para los trabajadores es a pedirle a sus empleadores que les consignen las cesantías y a retirarlas sólo para los casos que estipula la Ley. A los empleadores, Protección les invita a hacer el pago oportuno de esta importante prestación social.

Se puede escoger entre portafolios de largo y corto plazo

El actual sistema de cesantías, el cual es administrado a través de dos portafolios uno de largo y otro de corto plazo, permiten a las personas optar por la posibilidad de contar con un mayor rendimiento, según el portafolio que elija. Sin perjuicio de lo anterior, es importante recordar que en cualquiera de las dos alternativas, su dinero está disponible en todo momento en caso de requerirlo.

Tomado de: https://www.larepublica.com.co/portal/index.php/component/content/article/81-finanzas/3721