Fuente: https://www.cnnexpansion.com
Si planeas llevar a tu negocio a la nube, hazlo de forma escalonada respetando ciertos procesos; recuerda que necesitas dejar algunas aplicaciones en tu sistema de cómputo, no migres todo.
CIUDAD DE MÉXICO (CNNExpansión.com) — Aunque el ‘Cómputo en la nube’ puede resultar más sencillo para las pequeñas y medianas empresas (Pyme) que aún no hacen uso de ningún sistema de operación, la adopción de esta tecnología no es un cambio que se haga de la noche a la mañana.
“En muchas ocasiones los pequeños negocios no tienen la infraestructura tecnológica, por lo tanto, para ellos es más sencillo tomar ventaja de los servicios que ofrecen a través de este sistema, además de ser más fácil que se adecuen a esta tecnología y tengan acceso a plataformas que de otra forma no podrían”, dijo el director de Business Process Outsourcing de Capgemini México, Ricardo Valencia.
El denominado cómputo en la nube, es un nuevo modelo de prestación de servicios de negocio y tecnología a los cuales se accede desde Internet y se provee por medio del outsourcing, según la organización de Estados Unidos, IEEE Computer Society.
Para el 2012, el 80% de las empresas ‘Fortune 1000′ estarán utilizando algún tipo de servicio de cómputo en la nube, mientras que el 20% de los negocios no poseerán activos de Tecnología de la Información (TI), según datos de la consultora Gartner.
Aunque la tendencia es que cada vez más las empresas migren a este sistema de operación, los microempresarios mexicanos todavía experimentan ciertas limitantes que van más allá de la misma tecnología, precisó el directivo de Capgemini.
“La tecnología ya está disponible para todos los tamaños de negocios, por lo que las limitantes de los pequeños empresarios están más en los procesos y en el convencimiento de tener una operación ordenada bajo las mejores prácticas organizacionales que les permita migrar al cómputo en la nube y sacarle provecho”, añadió Ricardo Valencia.
En el caso de que estés considerando subir algunas operaciones de negocios conoce que no debes hacer.
1. No debes pensar que de la noche a la mañana vas a cerrar el centro de cómputo y estar en la nube, ya que se trata de un proceso paulatino.
2. No migres todo a la nube, hay un número de aplicaciones de software que necesitas seguir controlando como se hace tradicionalmente.
3. Evita llevar tu servidor a la red sin antes pasar por un proceso de virtualización.
4. El cómputo en la nube no es una moda pasajera que vaya a desaparecer, así que considera dicha tecnología como una inversión a largo plazo para tu negocio.
5. Determina qué área de negocio es estratégica para la empresa y que requiere de una operación desde la nube.
Para que tomes una decisión certera cobre qué le conviene más a tu negocio, conoce cuáles son los tipos de ‘nube’ que hay en el mercado, según datos de Capgemeni.
Las nubes públicas: se manejan por terceras partes, y los trabajos de muchos clientes diferentes pueden estar mezclados en los servidores, los sistemas de almacenamiento y otras infraestructuras de la nube.
Las nubes privadas: son una buena opción para las compañías que necesitan alta protección de datos y ediciones a nivel de servicio, ya que tienen una infraestructura en-demanda manejada por un solo cliente que controla qué aplicaciones debe correr y dónde.
Son propietarios del servidor, red, y disco y pueden decidir qué usuarios están autorizados a utilizar la plataforma.
Las nubes híbridas: combinan los modelos de nubes públicas y privadas, aquí el empresario es propietario de unas partes y comparte otras, aunque de una manera controlada.
Tomado de: https://www.cnnexpansion.com/emprendedores/2011/01/31/la-nube-opcion-para-las-pymes