Los cerca de 19 atentados terroristas contra el oleoducto Caño Limón Coveñas han provocado que se detenga la producción petrolera, se incumpla por parte de Ecopetrol exportaciones de 35.000 barriles de crudo diarios y se despida a por lo menos 500 contratistas de la actividad petrolera.


El atentado dinamitero contra el oleoducto registrado el 25 de marzo en la vereda La China, del municipio de Toledo, en el Norte de Santander, no ha podido ser reparado por la negativa de los aborígenes u’wa para permitir el ingreso de las autoridades y los técnicos petroleros a sus predios.

Voceros de Ecopetrol indicaron que esta situación paraliza la producción petrolera debido a que los tanques de almacenamiento se encuentran a plena capacidad. Este hecho ha motivado la suspensión de por lo menos 500 contratistas que laboran en los campos de Caño Limón que opera la multinacional Occidental.

En lo corrido del año se han registrado 19 ataques dinamiteros contra el oleoducto, el más extenso del país, que lleva el crudo desde los campos en Arauca hasta el puerto norte de Covenas. El año pasado para el mismo periodo se habían presentado 24 atentados terroristas contra la infraestructura petrolera.

La imposibilidad de transportar crudo por el oleoducto ha llevado a Ecopetrol a incumplir algunos contratos petroleros con firmas internacionales, aduciendo fuerza mayor para evitar sanciones. Esos contratos son de crudo Vasconia Norte, situación que obliga a la reprogramación de las ventas externas.

Hasta el momento ningún vocero de la multinacional petrolera ha explicado la situación de la producción petrolera en el campo operado por Occidental.

El ministro de Minas y Energía, Amylkar Acosta, dijo que en los últimos días se han presentado varias arremetidas terroristas contra la infraestructura del transporte petrolero. Se ha atentado contra los oleoductos Caño Limón Coveñas, Transandino y Bicentenario, admitió el ministro.

“Se ha venido respondiendo con mucha eficacia para restablecer el bombeo a través de estos oleoductos”, dijo el funcionario.


En Norte de Santander operan grupos al margen de la ley de las Farc y el ELN y en Arauca delinque este último grupo subversivo.

Acosta destacó que el ministerio de la Defensa ha dispuesto de un reforzamiento en el aseguramiento de la infraestructura, no solo de petróleo, sino de energía. Indicó que más de 30 atentados han sido evitados por las medidas adoptadas por la fuerza pública.


El ministro de Minas y Energía reiteró que estos atentados perjudican en forma directa a los trabajadores que fueron cesados mientras se restablece la producción petrolera.


Amylkar Acosta se mostró preocupado por los incumplimientos contractuales en que ha incurrido la estatal petrolera obligada por los atentados dinamiteros. “No solo eso atenta contra la confianza en el cumplimiento de las entregas, sino que también tiene costos económicos, salvo que se pueda invocar fuerza mayor”, dijo.

Recordó que también se afectan los ingresos de las regiones vía regalías y por impuestos para la Nación.

Tomado de: https://www.elespectador.com/noticias/economia/terrorismo-obliga-suspender-produccion-petrolera-y-cont-articulo-485666