Los objetivos son la protección de la vejez y estimular la formalización en pequeños negocios, de acuerdo con el ministro del Trabajo, Rafael Pardo, quien hizo el anuncio de que la idea será discutida en la sesión plenaria del Senado y la Cámara del martes próximo.

Por el tributo responderán pequeños comerciantes no responsables del IVA y conductores no asalariados ni propietarios de los vehículos.

La contribución se distribuiría aproximadamente así: 90 por ciento para una cuenta individual en el esquema de Beneficios Económicos Periódicos (BEP), una porción para un microseguro de riesgo laboral, algo para salud subsidiada y otra parte como impuesto al consumo.

IMPUESTO A INTERNET MÓVIL

De otro lado, la reforma tributaria contempla un nuevo impuesto al Internet móvil, del cuatro por ciento, que se suma al 16 por ciento del IVA, dando un cargo similar a los impuestos que se aplican al servicio de voz.

Dicho recaudo del cuatro por ciento estaría destinado a inversión social, como el desarrollo del deporte.

Rodrigo Lara, presidente de Asomóvil (agremiación de los operadores de telefonía celular), asegura que imponer “el impuesto nacional al consumo de Internet móvil convertiría a este naciente producto en uno reservado para los más pudientes”.

Tomado de: Portafolio.co