Llegar a un acuerdo sobre el reajuste del mínimo, hoy en 589.500 pesos, significa que las centrales obreras y los empleadores deben superar la diferencia de 2,2 puntos en sus propuestas de alza: las primeras piden un 6 por ciento; los segundos ofrecen un 3,8 por ciento.
 

Esa distancia era mucho más grande hasta las primeras horas del viernes pasado (4,5 puntos), pues, una vez reunida la Comisión de Concertación, la negociación llevó las propuestas a los niveles mencionados.
 

Esos movimientos generaron un clima de optimismo moderado sobre la posibilidad de acordar el aumento, y el ministro del Trabajo, Rafael Pardo, citó nuevamente para hoy a la Comisión.
 

Los empleadores no parecen dispuestos a mejorar su oferta. Y aunque la posición oficial de las centrales es la mencionada, se sabe que existe una gran presión de una parte de la cúpula de la CUT para no bajar más la petición de aumento salarial, que ya se opuso a la reducción de dos puntos, hasta el 6 por ciento.
 

Si hoy no se zanjan esas diferencias o, por lo menos, no hay una señal de que lo harán en las próximas horas, le tocará al Gobierno decretar unilateralmente el reajuste.

tomado de:portafolio.co