La nueva reforma tributaria es beneficiosa para quienes devengan dividendos. Accionistas recibirían un 4.59% más.
Así como tengo mis reservas en algunos aspectos de la Reforma Tributaria, destaco uno sustantivo y muy beneficioso para todos los accionistas: desde los de Ecopetrol, Grupo Aval y Davivienda hasta los de las empresas menos representativas pero igualmente importantes para el aparato productivo del país.
Según el borrador de la Reforma Tributaria, la tasa de renta corporativa –tarifa general- bajaría del 33% al 27%, pero gravaría la repartición de dividendos con el 4%. Ese 4% se denomina una tarifa especial.
La tarifa especial gravaría los dividendos cuando éstos superen los 30 a 60 millones de pesos (cifra aún por definir). Es decir que lo que supere ese monto debe pagar el 4% de impuestos.
Muchos hablan de esto como una doble tributación, porque grava en cabeza de la empresa y de los accionistas las utilidades. Lo que sucede es que el impuesto en cabeza del accionista se calcula con una tarifa distinta de la general.
Comparado con el estatuto tributario actual, lo que propone la Reforma Tributaria será beneficioso para el accionista. El siguiente cálculo demuestra sus bondades:
Nota: Por simplicidad en los cálculos no incluyo el 10% de Reserva Legal que se debe calcular sobre las utilidades netas después de impuestos. Tampoco calculé que el impuesto del 4% de dividendos solo aplicaría a los que superen los 30 a 60 millones de pesos (cifra aún por definir).
Una empresa que genera 600 millones de utilidades y es gravada según el régimen actual con un 33% de impuestos, puede repartir 402 millones de dividendos. Mientras que con la nueva reforma tributaria podrá repartir 420 millones, es decir un 4.59% más.
El cálculo demuestra que mientras que hoy se reparten como dividendos el 67% de las utilidades, con la nueva reforma se repartirían el 70.08% de las utilidades. Así las cosas para el accionista y sin importar en cabeza de quien se graven las utilidades, la tasa efectiva de renta pasa del 33% al 29.92%.
A todas luces el cambio propuesto será beneficioso para los accionistas, buscaría hacer más transparentes las cifras y ojalá incentive la creación de empresas.
Tomado de: finanzaspersonales.com.co
