Julieth González trabaja en una empresa de servicios de apoyo en el sector petrolero y con sus compañeros ve los partidos por Internet a escondidas de sus jefes. Si el partido es al mediodía todos piden su hora de almuerzo en el tiempo exacto de la transmisión para verlo en alguna tienda cercana.

Lo mismo le pasa a Jhonatan Agudelo, quien trabaja en una empresa de telecomunicaciones y busca un espacio para ver los partidos. Para él, la única oportunidad es a la hora del almuerzo o en sus periodos de descanso, porque ni escucharlos por radio puede, debido a su trabajo. “Hemos propuesto ver los partidos todos juntos, pero hacen descontar la hora del almuerzo, llegar más temprano o salir más tarde para reponer el tiempo”, dice Julieth con algo de frustración.

Jessica Mac Master Rojas, vicepresidente de Gestión Humana y Organizacional de Esenttia, afirma que en Colombia existe un atraso en la implementación de prácticas orientadas al mejoramiento de calidad de vida de los colaboradores.

“Un alto porcentaje de las compañías cree que este tipo de actividades son una pérdida de tiempo y no han comprendido que en la medida en que la gente se siente más feliz produce más”.

La directiva apoya las alternativas que los jefes de recursos humanos se han ingeniado para mantener a los empleados conectados con eventos futbolísticos y destaca que no solo el fútbol puede generar motivación.

“Hay más actividades que mueven a las personas. El área de recursos humanos debe fomentar espacios para que los colaboradores dejen de trabajar en ciertos momentos y se desconecten de la rutina, porque esos instantes incentivan la productividad, la imaginación y la creatividad”, añade.

Claudia Solano, vicepresidente de Gestión Humana y del Conocimiento en Old Mutual, comparte esta posición y afirma que todas las empresas deberían ofrecer estas facilidades que mejoran el ambiente laboral. “Estamos convencidos de que a partir de la confianza es mucho más fácil, porque cuando confías en la gente y le das responsabilidad, cumple y se compromete”.

¿Qué pasa con los que no pueden?

Julieth y Jhonatan están temporalmente sujetos a las políticas de sus empresas que impiden disfrutar de ambientes de recreación como estos, sin embargo, los expertos en recursos humanos hacen anotaciones al respecto.

“Ante todo debemos entender que no es una obligación abrir estos espacios y que como colaboradores tenemos unas responsabilidades para con nuestro empleador. En caso de querer ver los partidos, y si la compañía no provee esta posibilidad, la mejor opción es pedir este tiempo como vacaciones”, dice Adriana Pulido, vicepresidente de Recursos Humanos para la Zona Andina en Schneider Electric, y agrega que las empresas podrían plantearse esta flexibilidad como una estrategia de motivación a sus colaboradores.

Por su parte, Jessica Mac Master Rojas recomienda a los colaboradores proponer estas alternativas a sus jefes y plantear la reposición del tiempo invertido. “Si no lo logran, es muy complejo que el empleado se revele contra las políticas de la compañía”, advierte.

Lo que algunas empresas implementan:

– Escoger un sitio común, cómodo y agradable donde la gente que le gusta el fútbol pueda ir a verlo.
– Instalar pantallas gigantes en lugares comunes, donde los empleados pueden asistir de acuerdo con las programaciones organizadas.
– Hacer un plan de compensación de tiempo para que los colaboradores, previo a las fechas de los partidos, hayan recobrado el tiempo invertido.

tomado de:https://www.elempleo.com/colombia/consejos_profesionales/deben-dar-permiso-las-empresas-para-ver-la-copa-america-/15942015