El director de regulación financiera del ministerio de Hacienda, David Salamanca, indicó que el gobierno reconoce la importancia de este sector, no solo porque su nivel de activos hoy llega a los $26 billones, sino por el gran impacto social que tienen al prestar servicios a más de 5 millones de colombianos.

Salamanca, refiriéndose a la proliferación de falsas cooperativas, recalcó que la regulación que se diseña está encaminada a que ciertas entidades que utilizan el nombre cooperativo no se vuelvan simplemente un vehículo de intermediación de créditos. Para ello las medidas se centrarán en el fortalecimiento patrimonial; en aclarar las diferencias entre aporte social y ahorro; en solucionar la problemática derivada de la existencia de asociados ‘de papel’ que no ejercen participación democrática en su cooperativa, de los abusos que se cometen por los altos costos de los servicios, entre otros.

Tomado de: cronicadelquindio.com