El destape, antenoche, del nuevo borrador de proyecto de reforma tributaria, con los ajustes del Gobierno, llevó a varios expertos a asegurar que la nueva tabla del impuesto mínimo alternativo nacional (Imán), ahora a partir de ingresos gravables de 3.350.000 de pesos, incrementa más los pagos de trabajadores con respecto al proyecto inicial.

En un foro de la Universidad Externado, Orlando Corredor, de la firma Tributar, señaló que “llama la atención que modifican el Imán y cambian las tarifas de los rangos menores, lo que genera un mayor impacto para los que tienen menores ingresos.

Alguien de 3’350.000 va a pagar ahora más impuesto que lo que tenía el proyecto inicial.

Actualmente, su base gravable es sobre 1.134 unidades de valor tributario (UVT) y ahora será de 1.847. Pasará de pagar 219.000 pesos a 874.000 pesos al año. En el proyecto inicial su pago era de 775.000 pesos”.

Para Julio Roberto Piza, director de derecho fiscal de la Universidad Externado, “el Imán es un esquema de eficiencia, tiene sacrificios de equidad, si no, no tendría sentido.

El Gobierno dice que el 99 por ciento de asalariados gana menos de 4 millones; a ellos no los va a cubrir”.

El presidente del Instituto de Derecho Tributario, Carlos Mario Lafaurie, señaló que mientras en el actual modelo de tributación un trabajador puede descontar salud y pensiones, 25 por ciento de su salario y otros pagos como intereses de vivienda, ahora las deducciones están, pero en teoría, porque el pago no puede ser inferior al mínimo de la tabla.

Sobre la amnistía patrimonial que incluye ahora la reforma revelada ayer por EL TIEMPO, Corredor dijo que el saneamiento siempre es bienvenido.

“Es una buena oportunidad para que el que ha ocultado bienes obtenidos lícitamente, pueda declararlos ahora que no va a haber renta presuntiva”, anotó.

Por su parte, Piza opinó que “teóricamente no es conveniente, desestimula el cumplimiento tributario futuro, pero por un principio de realismo es necesario hacerlo para vincular capitales que están por fuera”.

Javier Díaz, presidente de Analdex, comentó que “cuando se hacen las reformas a veces conviene hacer un borrón y cuenta nueva. Técnicamente no debería existir amnistía, porque induce a evadir, ocultar para más adelante aprovechar, pero puede ser útil”.

HOTELEROS, EN ALERTA POR IVA

El gremio de los hoteles se manifiesta preocupado con la posible alza del IVA para sus servicios, que pasaría de 10 a 16 por ciento, según el proyecto de reforma tributaria.

José Hernando Bayona, presidente de Cotelco Bogotá y gerente del hotel Embassy Suites de esta ciudad, advierte que lo que está en juego es la competitividad del sector frente a la competencia de otros destinos en diferentes países de la región.

De acuerdo con Bayona, para hoteles corporativos, es decir, aquellos que reciben viajeros de negocios en las grandes ciudades, el alza del IVA al 16 por ciento puede que no tenga efecto, pues ese IVA es deducido por las empresas que envían en misiones de trabajo a sus ejecutivos.

Por el contrario, el alza del impuesto tendría efecto en pequeños hoteles, que reciben, especialmente, a viajeros o familias en viaje de placer.

“Al pequeño hotel es al que van usualmente personas naturales, independientes –dijo Bayona–.

Entonces, para ellas sí resulta automático subirles más la tarifa porque necesariamente tienen que cobrarles el impuesto.” Por ese motivo, el sector plantea que no haya cambios.

Tomado de: Portafolio.co