Con frecuencia, a las personas se les olvida que las tarjetas de crédito permiten adquirir hoy un bien o un servicio y pagarlo después, a través de unas cuotas mensuales, y como cualquier otro préstamo, tiene intereses y una cuota de manejo.

Las tarjetas de crédito pueden ser de gran ayuda para las personas, siempre y cuando los pagos que se realicen se encuentren dentro de su presupuesto. 


Sin embargo, el uso del dinero plástico también puede llegar a ser un verdadero dolor de cabeza, sobre todo para aquellos que consideran que su tarjeta de crédito es un dinero “extra” que les permite gastar por encima de sus posibilidades y no reconocen que se trata de otra forma de crédito de consumo.


Con frecuencia, a las personas se les olvida que las tarjetas de crédito permiten adquirir hoy un bien o un servicio y pagarlo después, a través de unas cuotas mensuales, y como cualquier otro préstamo, tiene intereses y una cuota de manejo.


Para usar adecuadamente su tarjeta de crédito tengan en cuentas las siguientes recomendaciones:

Infórmese y compare. Antes de adquirir su tarjeta, compare las distintas opciones que hay en el mercado y elija la tarjeta que más se adapte a su capacidad de pago y necesidades. No todas manejan las mismas tasas ni ofrecen lo mismo. Pregunte cuánto es la cuota de manejo, con qué periodicidad se paga, qué tasa de interés le cobran, cuándo es su fecha de corte y cuáles beneficios adicionales le ofrece cada entidad.


Asegúrese de contraer sólo deudas que pueda pagar
. Las entidades financieras llevan un registro del comportamiento de pago de las tarjetas de crédito que es reportado a las centrales de riesgo. Pagar oportunamente puede servirle para lograr otros créditos en el futuro o ampliar el cupo que ya tiene, pero colgarse en las cuotas implica dañar su historial crediticio.


Pague a una cuota. 
Siempre que su capacidad de pago lo permita, difiera sus compras a una cuota, que no le genera intereses, y le permite aprovechar beneficios de la tarjeta de crédito como la devolución de los dos puntos del IVA. Se aconseja a quienes tengan una tarjeta de crédito hacer compras a una cuota los primeros días después de la fecha de corte, para que puedan financiarse a una tasa de 0% de interés hasta por 50 días (30 días del mes, más los 20 días que los bancos, por lo general, dan a partir del corte para pagar lo indicado en el extracto).


Pague más del mínimo.
 Hacer abonos adicionales a la cuota mínima permite reducir el saldo total de la deuda de una manera más rápida y sobre todo, pagando menos intereses.

No olvide su fecha de pago. Si decide diferir a plazos su compra, trate siempre de pagar su cuota a tiempo para evitar el cobro de intereses de mora.


Lleve el control de los pagos.
 Revise siempre su extracto y verifique que las compras que allí aparecen realmente hayan sido efectuadas. Es importante guardar el voucher (documentos firmados por la compra) para presentarlo a la entidad en caso que se requieran aclaraciones.


Sáquele provecho a los beneficios adicionales.
 Los programas de lealtad de las entidades ofrecen a los tarjetahabientes beneficios como millas, ofertas en establecimientos de comercio, asistencia en viajes y seguros, entre otros. Averigüe por los servicios adicionales que su tarjeta le ofrece y aprovéchelos, siempre y cuando estén acordes con sus patrones de gasto.


Siga las recomendaciones de seguridad.
 No le preste su tarjeta a nadie, no la pierda de vista y no acepte ayuda de extraños en las operaciones en datafono.

Recuerde que los avances en efectivo son costosos. No utilice su tarjeta de crédito para obtener efectivo, a no ser que sea una necesidad. Los avances son un préstamo más, por el que hay que pagar un costo asociado con su cobro, cuyo valor depende de la entidad y del canal que se use y que, además, genera unos intereses.


Si está en problemas, hable con su entidad financiera. Antes de entrar en mora, acuda a su entidad y propóngale un acuerdo de pagos.

Tomado de: cuadresubolsillo.com