La iniciativa condensa cinco grandes cambios en el sistema actual como lo es la destinación de los recursos de la salud considerados como “públicos de principio a fin y deben ser invertidos en Salud”, como se lee en uno de los apartes del documento radicado.
En ese sentido, el Estado “garantiza, proteger y respetar el derecho fundamental a la salud. Su papel es central en la toma de decisiones, controla el sistema y orienta las políticas del sector”.
Uno de los congresistas presentes, el senador Luis Carlos Avellaneda sostuvo que uno de los objetivos es “acabar con el modelo de la Ley 100 y un modelo que le sirva a los colombianos y no a las ESP, especialmente aplicando el principio de igualdad, en el que todos puedan ser atendidos sin distingo de clases”.
Otro de los puntos del proyecto radicado es el del acceso a servicios para que sea directamente en el lugar en donde se reside o se trabaja, con tan solo presentar el documento de identidad, así como que se consagre a la salud como un derecho fundamental.
La representante Ángela María Robledo indicó que la iniciativa “elimina las EPS, la integración vertical y cumple con el mandato constitucional de descentralizar la salud. No queremos pañitos de agua tibia para la salud que agoniza. Se requiere una reforma estructural del sistema de salud”.
Los autores de la radicación fueron los miembros de la Comisión de Seguimiento a la Sentencia T-760 de 2008 y de Reforma Estructural al Sistema de Salud y Seguridad Social (CSR), la Alianza Nacional por un Nuevo Modelo de Salud (ANSA) y los legisladores.
Tomado de: elnuevosiglo.com.co
