Pocos fueron los sorprendidos con la reducción de la meta de crecimiento del Producto Interno Bruto, PIB, del Gobierno Nacional, para el año en curso.
Fue el propio ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, el encargado de anunciar ayer que la previsión del Gobierno para el crecimiento del PIB del año es de 4,5%, y no de 4,8% como se había previsto inicialmente.
De acuerdo con el Ministro, 4,5% es un buen resultado y está sustentado en un aumento de la producción cafetera que supera el 30%, en una producción de petróleo por encima del millón de barriles diarios y por el incremento de la inversión y el consumo interno.
"En parte todo se ha logrado por los planes de impulso tanto a la productividad como al empleo, a la mejor tasa de cambio, pero sobre todo por la confianza de los consumidores que siguen demandado crédito, que continúan estableciendo buenos niveles de consumo, de manera que la economía va por buen camino en esa materia", explicó el funcionario.
Sin embargo, los pronósticos sobre el resultado del PIB para el primer trimestre del año, que será anunciado por el Departamento Administrativo Nacional de Estadística, Dane, el próximo 20 de junio, no son del todo alentadores.
De acuerdo con el consenso en el mercado de valores, el crecimiento será de 2,5%; según el Banco de la República estará entre 2,5% y 3%, y el Gobierno Nacional le apuesta al 3% a pesar de los problemas que hubo durante los primeros tres meses del año por los paros agrícolas, los conflictos laborales en Cerrejón y los problemas ambientales de la Drumond.
Señales de recuperación
Pese a los regulares resultados esperados para el primer trimestre, algunas cifras dan fe de que en el segundo trimestre podría haber una recuperación económica.
Por un lado, las inversiones en obras civiles aumentaron 18% impulsadas por obras de construcción para minería, centrales generadoras eléctricas y tuberías largas y cortas.
Además, los índices de confianza del consumidor, del comercio y la industria elaborados por el centro de investigación Fedesarrollo, han mostrado signos de recuperación, en especial la disposición para comprar vivienda. Adicionalmente, el dólar sobre la barrera de los $1.850, ha incrementado las rentabilidades para el sector exportador, una buena señal para la industria y el empleo.
Por último, el consumo interno, uno de los principales jalonadores del PIB también ha recibido estímulos (bajas tasas de interés) que ya empiezan a mostrar resultados. Según la firma Raddar, en mayo de este año los hogares colombianos gastaron 7,8% más que en el mismo período de 2012.
Lento crecimiento
Mientras el gobierno nacional da a conocer sus proyecciones frente al crecimiento económico de Colombia, el Banco Mundial
revisó sus perspectivas para el crecimiento mundial.
La entidad proyectó que el PIB mundial crecerá 2,2% este año, 3% en 2014 y 3,3% en 2015.
Los países en desarrollo crecerían 5,1% este año, la región de Asia oriental y el Pacífico crecerá 7,3%, el PIB de Europa y Asia central se expandirá 2,8%, el de América Latina y el Caribe, 3,3%; el de Oriente Medio y el Norte de África, 2,5%; y en Asia meridional y África al sur del Sahara el PIB variará 5,2% y 4,9% respectivamente.
"El intercambio comercial mundial, después de contraerse durante varios meses, se está expandiendo nuevamente, pero se estima que lo hará solo en 4,0% en 2013, muy lejos del ritmo de 7,3% previo a la crisis", mostró el informe.
Tomado de: vanguardia.com