La cartera de créditos del sistema financiero lleva nueve meses bajándole a su ritmo de crecimiento.
Según datos de la Superintendencia Financiera, el saldo de cartera de las entidades se ubicó en 226 billones de pesos al cierre de mayo, lo que muestra un aumento anual de 18,3 por ciento.
Esta dinámica es 5,5 puntos inferior a la que se registró en agosto del 2011, cuando la cartera alcanzó su máximo avance de los últimos cuatro años (23,8 por ciento).
La desaceleración proviene de dos fuentes principales: la oferta de crédito por parte de las entidades del sector se ha moderado en los últimos meses, pero, adicionalmente, las personas y las empresas están demandando menos recursos.
Un informe de InterBolsa afirma que "el desembolso de crédito está comenzando a ser impactado por una política monetaria restrictiva".
El más reciente reporte sobre la situación del crédito del Banco de la República advirtió que los intermediarios financieros notaban una baja en la demanda de préstamos, tanto de personas como de empresas.
A esto, añadió que las entidades de crédito habían endurecido los requisitos para hacer desembolsos, no solo por consideraciones como la capacidad de pago de los clientes y la información financiera, sino por las necesidades de aumentar el aprovisionamiento.
DIVERSO DESEMPEÑO
El comportamiento del crédito ha sido distinto en cada uno de los segmentos.
La modalidad comercial, que concentra el 61,2 por ciento del total, es el que ha registrado el mayor enfriamiento.
No solo porque lleva doce meses consecutivos aminorando su ritmo, sino porque pasó de crecer a una tasa del 24 por ciento en mayo del 2011 a un avance anual del 15 por ciento en el mismo mes de este año.
En el caso de los préstamos de consumo, modalidad en la cual han estado encendidas las alarmas, la desaceleración ha sido menos marcada.
El saldo de cartera lleva 9 meses de reducción en su crecimiento, aunque en diciembre registró un leve repunte por las compras que se realizan en esa época del año.
A mayo del 2012, el crecimiento fue del 22,2 por ciento, al llegar a 64,6 billones de pesos.
El pico de crecimiento había sido en agosto del 2011, cuando alcanzó a subir un 25,4 por ciento.
Un informe de InterBolsa señala que "la desaceleración en este segmento deberá continuar en lo que resta del año, a medida que las entidades tomen acciones proactivas en busca de controlar el deterioro de la cartera vencida y evitar así mayores egresos por provisiones de cartera".
En microcrédito también se ha sentido el freno. A mayo, había crecido 21,3 por ciento, mientras que hace seis meses traía una dinámica superior al 38 por ciento.
CARTERA EN DÓLARES REPRESENTA EL 7,2%
Las empresas que desarrollan actividades de comercio exterior concentran cerca de la mitad de la cartera comercial del sistema financiero y el 80 por ciento de los desembolsos en dólares.
Sin embargo, los importadores recurren más a la financiación bancaria que quienes desarrollan actividades exportadoras.
Así se desprende de un estudio realizado por investigadores del Banco de la República; con datos de más de 7.000 empresas que responden por el 56 por ciento de las exportaciones y el 67 por ciento de las importaciones.
El informe señala el 80 por ciento de los recursos que desembolsan las entidades de crédito para las operaciones de comercio internacional se concentra en empresas importadoras.
Según el Emisor, las firmas exportadoras han perdido participación dentro del crédito bancario por dos razones principales.
Por un lado, muchas de las compañías pueden pedirle anticipos a sus clientes, lo cual reduce sus necesidades de financiamiento.
Pero, adicionalmente, la baja puede estar relacionada con que las exportaciones de productos no tradicionales han perdido participación dentro del total de las ventas externas.
Otro de los hallazgos del estudio es que el intercambio comercial es sensible ante las restricciones del crédito.
La investigación afirma que una baja del 10 por ciento en la oferta de crédito reduce el valor de las exportaciones en un 3,95 por ciento y el de las importaciones en un 5,12 por ciento.
Si bien hubo una contracción del financiamiento en dólares como consecuencia de la crisis financiera internacional, lo cierto es que empezó a recuperarse y, entre finales del 2009 y finales del 2011, los préstamos en dólares duplicaron su participación en la cartera total, al pasar del 3,5 al 7,2 por ciento.
Este tipo de créditos es utilizado con mayor intensidad en las empresas exportadoras. Según el informe, casi un tercio de las obligaciones de estas compañías está representado en moneda extranjera, mientras que en las importadoras la proporción es de apenas 16 por ciento.
Esto, mientras que en el promedio de las firmas que desarrollan actividades de otro tipo, llega al cuatro por ciento.
Tomode de:portafolio.co