El contrabando, el desempleo, el retraso en los pagos a exportadores colombianos y la incertidumbre por la tasa de cambio en Venezuela son factores determinantes en la crisis por la que atraviesan los comerciantes y habitantes de la frontera, testigos en su cotidianidad del agudizamiento de estos problemas.
Recientemente Nicolás Maduro, presidente encargado de Venezuela, pronosticó que las operaciones comerciales entre Colombia y su país llegarían a los US$10.000 millones anuales, frente a los US$3.400 millones que se registraron en 2012; sin embargo, Magdalena Pardo, presidenta de la Cámara Colombo-Venezolana, señaló que más allá de los acuerdos que logren ambos gobiernos, los papeles del Banco de la República de Colombia y del Banco Central de Venezuela serán determinantes para superar los impasses, mediante la generación de un régimen especial que permita operar de peso a bolívar (y viceversa) sin utilizar el dólar como moneda referente.
"Cualquier cosa que los dos bancos centrales hagan les servirá a ambos pueblos hasta en la lucha contra la inflación. Pasar por alto el dólar en estas operaciones comerciales formaría parte del conjunto de medidas que generen ventajas tributarias a los aparatos productivos", señaló.
El ministro de Hacienda de Colombia, Mauricio Cárdenas, afirmó que el plan de choque frente a ciertos problemas económicos en Cúcuta, ciudad que según el DANE registró el índice de desempleo más alto en el país durante febrero de 2013 (19,1%), consiste en inversiones para infraestructura superiores a los $230.0000 millones, "lo cual aliviará indudablemente los índices de desocupación".
Pese a lo planteado por el ministro, Guillermo Botero, presidente de la Federación Nacional de Comerciantes, considera que la propuesta no se ajusta a las necesidades actuales, puesto que requiere concesiones y créditos que comenzarán a ejecutarse en 2014, "cuando se debería contemplar la eliminación del IVA y la posibilidad de declararla zona libre de comercio".
Tomado de:elespectador.com