El primer informe que se realiza sobre este tema en Colombia concluyó que los colombianos asocian las cesantías a atributos como el ahorro, el futuro, la familia, el hogar, las prestaciones y la educación.

El sondeo estableció que el 59 por ciento de los trabajadores colombianos invirtió esa prestación social de carácter especial en vivienda, distribuidos de la siguiente manera: el 33 por ciento para remodelación de la misma y el 26 para compra de un inmueble, en tanto que el 34 por ciento las empleó para educación; el 8 por ciento como soporte al momento de quedar desempleado; el 7 por ciento para el pago de deudas; el 5 por ciento para el pago de gastos personales; el 3 por ciento para gastos del hogar y el uno por ciento en vacaciones, viajes, compra de carro o moto.

La muestra se realizó entre 1.040 trabajadores de las ciudades más importantes del país como lo son Bogotá, Medellín, Cali, Barranquilla, Bucaramanga, Armenia y Villavicencio.
 

Así mismo, concluyó el documento, que el 44 por ciento de los colombianos lleva menos de dos años ahorrando sus cesantías, seguidos de un 30 por ciento que lo hace entre 2 y 5 años y el 11 por ciento entre 5 y 10 años.
 

Para los actuales afiliados al FNA, los principales atributos para elegir el ahorro como principal opción fueron: la posibilidad de acceder a créditos de vivienda; la agilidad en la solicitud y aprobación de créditos; la trayectoria; la transparencia, la tradición y la confiabilidad; el respaldo y la solidez de la entidad, representada en premios y calificaciones.
 

De acuerdo con Invamer, el 40 por ciento de las mujeres invirtió sus cesantías en educación, mientras que sólo el 29 por ciento de los hombres las usó para ese fin. Así mismo, el 37 por ciento del sexo masculino las destinó para la remodelación de la vivienda. Por el género, el 85 por ciento de las mujeres manifiesta tener claro qué son las cesantías en comparación con el 80 por ciento de los hombres.
 

En ese mismo sentido, el 67 por ciento del sexo masculino usó más las cesantías frente al 60 por ciento de las mujeres.
 

En Bogotá se protegen más las cesantías

Según el estudio, Bogotá es la ciudad que presenta el mayor número de personas, un 12,39 por ciento, que protege sus cesantías, en un período comprendido entre 5 y 10 años.

Barranquilla se destaca como la ciudad donde más personas han usado alguna vez sus cesantías, un 76 por ciento, mientras que Armenia y Medellín, son las capitales donde menos manifiestan haber usado esa prestación social de carácter especial.
 

Barranquilla, Villavicencio y Bucaramanga lideran el listado de las ciudades donde más del 50 por ciento de las personas las usó en remodelación de vivienda.
 

De la misma forma, el documento subraya que el 67 por ciento de los jóvenes entre 18 y 25 años se vincularon a su actual fondo de cesantías por recomendación de su empleador.

"La muestra identifica que a medida que los colombianos tienen una mayor edad, pasan de invertir sus cesantías en educación (entre 18 y 25 años) a usarlas en compra y posteriormente en remodelación de vivienda", agrega.
 

El 46 por ciento de los trabajadores entre 18 y 25 años que tiene actualmente ahorradas sus cesantías las emplea en la compra de vivienda y el 24 por ciento, en educación.

"El estudio destacó que el 42 por ciento de los afiliados del FNA usa sus cesantías en compra de vivienda, en tanto que el 31 por ciento las invierte en educación y el 25 por ciento en remodelación de vivienda", recalca.
 

El informe del FNA concluye que el 46 por ciento de los trabajadores del Nivel Socio Económico (NSE) bajo destina sus cesantías en la compra de vivienda y un 17 por ciento, en educación. "Los NSE medios son los que más han invertido sus cesantías en educación en comparación con los NSE bajos, donde el principal destino es la remodelación de vivienda", dijo.

Tomada de :portafolio.co