Los pequeños contribuyentes también contarán con un esquema combinado que meterá en uno solo los gravámenes a la renta y el IVA.

Se trata del monotributo, que irá en la próxima reforma, según confirmó el ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, quien lidera la construcción del proyecto que será tramitado en este segundo semestre ante el Congreso.

El monotributo es una idea que también hace parte del paquete propuesto por la Comisión de Expertos Tributarios, y que está siendo aplicado en varios países de América Latina, como Argentina, Brasil y Uruguay.

El propósito de esta fusión de obligaciones tributarias es combatir la informalidad, simplificar la tarea de pagar impuestos y, por esta vía, abaratar los costos que acarrea a los pequeños contribuyentes el cumplimiento de su deber.

Según el informe de la comisión, la propuesta original proviene del Banco Mundial y recae sobre las micro y pequeñas empresas que aportan impuestos a través del régimen simplificado, el cual no solo es un canal de evasión, sino que genera inequidad, pues “promueve un tratamiento privilegiado en cuanto a las personas naturales que son clasificadas en este régimen, pero no cobran IVA sobre sus ventas de bienes y servicios gravados”, según argumenta el informe.

Los expertos tributaristas sostienen en el documento que “muchos países en lugar de abolir los regímenes simplificados para pequeños contribuyentes han comenzado a diseñar e implementar sistemas simplificados eficientes que buscan no solo incluir más personas naturales y empresas pequeñas en el sistema y aumentar así el recaudo, sino también contribuir a la formalización de la economía”.

Con dos impuestos

Aunque en países como Argentina el monotributo incluye en el pago unificado hasta las contribuciones a la seguridad social, en Colombia, a la luz de la recomendación de la comisión, se incluiría el impuesto de renta y el IVA, cuyos umbrales se deberán establecer “en niveles que permitan segmentar adecuadamente los microcontribuyentes de los contribuyentes pequeños”, dice el informe.

Además queda abierta la posibilidad de que estos umbrales puedan ser utilizados para aportar el ICA (impuesto de industria y comercio), que es de carácter local, pero las recomendaciones de la comisión también se ocuparon de los impuestos territoriales.

Los expertos tributarios sostienen en su informe que el IVA, aunque es un impuesto sencillo, está impactando en su productividad, pues “Colombia solo recauda el 40 por ciento del potencial que tiene este tributo”, porque existen muchos beneficios tributarios. De igual manera -agregan-, la debilidad en la gestión y el escaso control a la evasión sacrifica el 26 por ciento del potencial que se podría obtener con el IVA.

Parte de las dificultades con el recaudo del IVA provienen del hecho de que este impuesto en el país es plurifásico, es decir, “grava el valor agregado en cada una de las sucesivas etapas de producción y distribución”, expresa el informe de los expertos. El panorama se complica aún más porque para ciertos productos existe un IVA monofásico, es decir, que los grava en una sola etapa del proceso. “Este es el caso de los derivados del petróleo, las gaseosas y las cervezas”, destaca el informe.

La existencia de un impuesto unificado para pequeños contribuyentes recogería todas estas segregaciones, pero según recordó el exdirector de la Dian, Juan Ricardo Ortega, esta propuesta se está intentando introducir en Colombia desde tiempo atrás. “La reforma que se hizo con Juan Carlos Echeverry como ministro de Hacienda arrancó con esa idea, que todos compartimos. Solo que es algo difícil de armar. El monotributo para las tiendas está avanzado, pero el de taxis, camiones y agro, no estaban listos en la reforma de esa época. Hay que hacer muchísimo trabajo previo para poder lograrlo, pero sin duda es el camino correcto”.

Opinan implicados

Según expresó Rosmery Quintero, presidenta ejecutiva del gremio de pequeños industriales (Acopi), hay aceptación del monotributo. “Además del valor del IVA, nos afectan los costos ocultos que trae la tarea de pagar diferentes impuestos con distintas tarifas y bases gravables. En ese sentido, un monotributo sería benéfico para los pequeños empresarios”.

Quintero agregó que la simplicidad que viene con un impuesto unificado reduciría el riesgo de cometer errores al hacer las declaraciones, lo que los salvaría de sanciones.

En el mismo sentido, Juan Ernesto Parra, director de Fenaltiendas (programa de Fenalco), señaló que “todo esquema de simplificación de pagos que permita a los contribuyentes vincularse de forma más fácil y eficiente, con su aporte, a los tributos del Estado es bienvenido”.

Sin embargo, Parra invitó a los constructores de la reforma a ser cautelosos al incorporar un esquema de monotributo. “Deben tener cuidado en ser equitativos y justos, para evitar que existan vacíos que pongan en riesgo los negocios de microempresarios”.

Quintero también hizo énfasis en que al elaborar la reforma, “el Gobierno no debe perder de vista que el sector empresarial es el que paga la mayor parte de los impuestos, contribuye con parafiscales y genera empleo. Por lo tanto, la tributación equitativa debe promover que se mantenga en la formalidad”.

Horacio Ayala, exdirector de la Dian, también estima que el monotributo es bueno, pero hay un inconveniente: “Necesita mucho control y la Dian es pequeña”.

Sostuvo que “el régimen simplificado lo burlan y no precisamente los pequeños, sino las grandes cadenas que se meten a un esquema en el que no encajan, pero lo hacen fraccionando negocios, poniéndoles un dueño distinto a cada uno para evadir impuestos”. Recordó que “simplificar y formalizar es lo ideal en un sistema tributario, pero requiere de un verdadero control, porque si se deja suelto, se vuelve un mecanismo de evasión”.

Descartan aplazar la reforma

La brevedad del tiempo para tramitar la reforma tributaria, que aún no está totalmente elaborada, es una de las preocupaciones de algunos colombianos. En días pasados, Gabriel Silva, columnista de EL TIEMPO, lanzó la idea de que el Gobierno aplace la presentación de este proyecto, por tratarse de una transformación estructural que requiere debates extensos. Como estrategia para conseguir los recursos que requiere el Estado, sugirió desencadenarse de la regla fiscal que le pone un tope al aumento del déficit fiscal, para lo cual hay que perder el miedo a endeudarse, sostuvo Silva.

Al respecto, el ministro Cárdenas descartó de tajo dicha idea. “No estoy de acuerdo. La prioridad económica en este momento es sacar adelante la reforma tributaria”.

Según esto, la reforma va al Congreso en este año. La ventaja es que la propuesta está siendo construida por varios equipos técnicos que trabajan las piezas de forma aislada pero coordinada, recogiendo además las opiniones de los gremios y, en general, de los contribuyentes.

MARTHA MORALES MANCHEGO
Economia y Negocios