El esfuerzo de los colombianos en el pago de impuestos se refleja en el hecho de que mientras en el año 2010 el recaudo fue de 70 billones de pesos para este año llegará a 130 billones.

Los comerciantes formales del país se rebelaron ante las nuevas cargas tributarias que se avecinan. Sin que el gobierno haya presentado oficialmente la reforma tributaria, la Federación Nacional de Comerciantes (Fenalco) se anticipó a las propuestas que se están cocinando y pidió que no sean los consumidores colombianos los que tengan que hacer el mayor esfuerzo.

“El comercio formal no soporta un aumento de este impuesto (IVA) a las tasas actuales, ya es difícil competir con la informalidad y llevar la tarifa general al 19 % nos pondrá en desventaja mayor”, afirmó el presidente de Fenalco, Guillermo Botero, durante la instalación del Congreso Nacional de Comerciantes, en Armenia. Y agregó que si con los acuerdos de paz hay temores, con la reforma tributaria hay espanto empresarial.

Según el dirigente gremial, en lugar de aumentar este impuesto, como lo propone la misión que presentó recomendaciones al gobierno, la tarifa se debería bajar del 16 al 15 %, ya que de lo contrario se afectaría a los comerciantes formales, que se verían en clara desventaja frente a la informalidad, el contrabando y la elusión.


Botero aseguró que la tributación para el empresariado colombiano llegó a niveles inmanejables y el próximo año sobrepasará el 50%. Por eso urgió una reforma tributaria que amplíe la base de tributación, racionalice el estatuto tributario y reduzca los impuestos a las sociedades, en lugar de incrementar más las cargas sobre las empresas y los consumidores.

“En lo corrido del siglo XXI se han expedido 31 leyes y 17 decretos que modifican el Estatuto Tributario. Esto significa que al menos se han proferido 3 reformas de índole impositivo por año”, dijo Botero, quien señaló que en este contexto la seguridad jurídica es prácticamente nula.

El esfuerzo de los colombianos en el pago de impuestos se refleja en el hecho de que mientras en el año 2010 el recaudo fue de 70 billones de pesos para este año llegará a 130 billones.

Botero, también reiteró sus dudas frente al acuerdo de paz y dijo que tiene conocimiento de que los comerciantes siguen siendo extorsionados en muchas regiones del país, y que mientras este delito no se elimine será muy difícil hablar de paz y seguridad.

El dirigente gremial es uno de los más duros críticos del Gobierno y es de los pocos que expresan sin tapujos los temores de los empresarios en diversos temas, como la reforma tributaria que será presentada ante el Congreso en octubre próximo y sobre la cual hay grandes expectativas si se tiene en cuenta la difícil situación de las finanzas públicas frente a gastos que en lugar de ceder, seguirán en aumento.