Contrario a las proyecciones de algunos analistas económicos, según las cuales la Junta Directiva del Banco de la República mantendría las tasas de interés en 7,50 %, el Emisor decidió bajarlas en 25 puntos básicos y dejarlas en 7,25 %, en su reunión de ayer.

De acuerdo con la Junta del Banco Central, algunos aspectos que llevaron a que cuatro de sus siete miembros decidieran bajar la tasa de intervención de política monetaria fueron la disminución de la inflación anual en enero, por sexto mes consecutivo, que se situó en 5,47 %; las expectativas de que este año la demanda externa sea mayor a la registrada en 2016; el crecimiento económico del país en el cuarto trimestre del año pasado, que fue de 1,6 %, “mejor que lo observado en el tercero”, y que en todo el año culminó en 2 %, y el nivel de las medidas de inflación básica y las expectativas de éstas, que según los cálculos de la tasa de interés real de política monetaria, se sitúan por encima de su promedio desde 2005.

El ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas Santamaría, señaló que reducir la tasa de interés “es una muy buena noticia, porque tenemos más razones para pensar que este es el año de Colombia Repunta. Tenemos que derrotar el pesimismo, generar confianza; este año va a ser mejor y, naturalmente, debe bajar la inflación. Esta es una buena noticia para los hogares colombianos, porque se disminuye el costo de crédito”, agregó.

Al respecto, el gerente del Banco de la República, Juan José Echavarría, explicó que “los efectos de los fuertes choques de inflación fueron bajando gradualmente”.

En ese sentido, Felipe Espitia, analista macroeconómico de Alianza Valores, consideró que como “la inflación ha perdido la aceleración con la que se venía pronosticando, el Banco de la República va a ir bajando la tasa gradualmente. Además, ante un panorama de inflación de 5,3 % para este año y el crecimiento de 2 % en el PIB, hay cierto margen para que en una reunión posterior, siga la caída de las tasas”.