Drummond emplea a unas 10.000 personas en sus dos minas y su puerto privado.
La huelga, que los trabajadores acordaron en principio, podría bajar en un tercio la producción del proveedor clave para los importadores europeos si llega a concretarse. “Si no hay acuerdo, habrá una huelga”, dijo César Flores, uno de los negociadores del sindicato Sintramienergética, a Reuters el domingo, confirmando que las negociaciones se reanudarán alrededor de las 11.00 hora local (1600 GMT) del lunes.
Los miembros del sindicato votaron a favor de la huelga el miércoles pasado y, de acuerdo con la ley colombiana, una paralización debe comenzar dentro de los 10 días desde la aprobación, es decir, a finales de esta semana.
Tanto Drummond como el sindicato han estado haciendo uso de la ventana de 10 días para seguir negociando.
Una huelga de los trabajadores de Drummond sería la segunda este año para la industria del carbón colombiano después de que los mineros de Cerrejón llevaron a cabo una paralización de un mes en febrero. Si llega a producirse una huelga larga, la escasez en los suministros podría aumentar el precio del carbón físico en Europa debido a que los clientes contemplan realizar sus compras antes del invierno.
Drummond, que hace una semana mejoró su oferta a un alza salarial de un 4,5 por ciento y un bono extraordinario, ha insistido que otras propuestas de los trabajadores están fuera de su alcance.
El sindicato, que exigió previamente un 10,7 por ciento de aumento, ha dicho que la oferta de la empresa se acerca a un nivel aceptable.
Un punto de conflicto, sin embargo, sigue siendo el destino de unos 400 trabajadores, varios de los cuales verán desaparecer sus empleos cuando la carga en cinta transportadora reemplace al sistema más intensivo existente en el puerto de Drummond a principios del 2014.
Tomado de:portafolio.co