Sin embargo, ¿se está haciendo de una manera eficiente?, el Banco Mundial, en su último estudio sobre el tema destacó seis claves fundamentales para avanzar en este sentido.

Este es un punto que copa espacios privilegiados en los planes de gobierno en Latinoamérica, pero, aún no ha logrado romper la exclusión que sufren casi 250 millones de adultos en toda la región.

El primero de ellos es reducir los altos costos que tienen algunos productos financieros, un factor que en muchos países en desarrollo, es la principal barrera de entrada. Según Luis Carlos Guzmán, director de economía de la Universidad Central, “lo cierto es que los costos acumulados en promedio de los productos están sobre US$6 al mes, lo que supone un freno a muchas personas”.

Igualmente, Asli Demirguc-Kunt, directora de investigaciones del Banco Mundial dejó claro que “los servicios financieros están fuera del alcance de muchas personas porque las fallas del mercado y del Estado han elevado los costos a niveles prohibitiva mente altos”.

El segundo factor, según el Banco Mundial son las políticas para la reducción de los requisitos, tales como las que se tienen Brasil, que han supuesto una puerta para la entrada de personas que estaban excluidas y para los expertos, le da mayores posibilidades de desarrollo, lo que supone más uso de los productos.

Sumado a esto, el tercer paso es la utilización de tecnologías como la banca móvil que junto con el cuarto, la innovación en la creación de nuevos productos más enfocados en solucionar las necesidades de cada consumidor, son fundamentales para los países emergentes.

El documento asegura que los servicios de banca móvil han sido importantes para una mayor inclusión de la población de bajos ingresos al ampliar la cobertura en zonas apartadas, abaratar los servicios financieros y facilitando el acceso para nuevos clientes.

El quinto paso es comenzar a desarrollar nuevos productos que atiendan a cada segmento. De acuerdo con Henry Bradford, vicerrector del Cesa, “prácticamente seguimos con las mismas opciones que se ofrecían hace unos años, falta un mayor desarrollo para atraer a más gente con los productos que realmente necesitan”.

Por último, el sexto paso, según el estudio del Banco Mundial es el hecho de que desde el mismo Gobierno se impulse el uso mediante el pago directo de servicios y retribuciones a través de depósitos electrónicos y no en efectivo como se sigue haciendo. Al tiempo que se debe mejorar los mecanismos de difusión de la información y la educación financiera de la población.

Así las cosas, el Banco Mundial estableció un hoja de ruta que deberían seguir los países para hacer una inclusión de manera responsable para sus finanzas.

Costos, distancia y documentación, freno al incremento
Al hablar de los puntos en los que hay que trabajar para avanzar hacia una mayor inclusión financiera, el Banco Mundial destacó tres aspectos principales que son los que impulsan hoy en día barreras para el acceso a los servicios financieros. Según la entidad, actualmente se observa como los altos costos que aún tienen los servicios y productos financieros, unido a la gran distancia que para muchas personas supone desplazarse hasta su banco para realizar transacciones y la alta documentación que en muchos casos se le requiere al cliente, se consideran los principales frenos para que haya cada vez más personas en el sistema financiero.

Las opiniones

Herny Bradford
Vicerrector del Cesa

“La clave para conseguir unos costos de los servicios más reducidos es apostarle a una mayor competitividad e innovación, algo que incluirá más población al sistema financiero”.

Luis Carlos Guzmán
Director del Departamento de Economía de la Universidad Central

“Uno de los puntos más importantes es lograr una mayor inclusión financiera pero a través de políticas responsables y de control para que la gente no se endeude en exceso”.

Rubén López Pérez

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Tomado de: larepublica.co