“El desarrollo económico de Colombia y de cualquier país está muy ligado a la política de un empleo decente y un salario justo”, dijo Garzón, y afirmó que si hay generosidad en el Gobierno y los empresarios y razonabilidad en los trabajadores “es posible llegar a un salario mínimo decente y concertado”.
 

Cuando al Vicepresidente se le preguntó sobre el porcentaje que debería subir el salario mínimo, aseguró que no tiene cifras exactas y que hay que evitar volverse prisionero de ellas, “sobre todo cuando éstas puedan terminar siendo miserables”.
 

Entre otras el vicepresidente Garzón afirmó que “así como el Gobierno tuvo generosidad para incrementar los salarios de los parlamentarios y altos funcionarios, también debe existir generosidad con quienes trabajan por el salario mínimo”.
 

A pesar de que Garzón no hace parte de la Mesa de Concertación de Política Salarial, el alto funcionario les pidió a todos los integrantes que se sensibilicen con la otra partes para llegar a un acuerdo beneficioso para todos.
 

Al ser interrogado sobre su influencia en la mesa, aclaró enfáticamente que no tiene ninguna y que hace dos años, cuando el Gobierno incrementó el salario mínimo en 4%, “yo no influí sobre el Presidente, él tomó la decisión por sí mismo”.
 

PASTRANA Y GAVIRIA, PELEA SIN SENTIDO
 

Consultado sobre el cruce de palabras entre los ex presidentes César Gaviria y Andrés Pastrana por cuenta de la publicación de un libro escrito por este último, Garzón afirmó que “está pasando algo absurdo”.
 

“Mientras en La Habana se está negociando por la paz, los ex Presidentes de Colombia nos están volviendo prisioneros del pasado”, dijo, y agregó que se trata de un pasado “de violencia, miseria, odio y muerte”.
 

El Vicepresidente afirmó que “se necesita que el pueblo colombiano piense en el presente y en un futuro de perdón, reconciliación, paz y bienestar”, pues consideró que “nada ganamos si hacemos la paz en La Habana, si aquí estamos promoviendo a nivel de los ex Presidentes y altos servidores públicos la cultura de los odios y resentimientos con la palabra”.
 

Por esta razón, hizo un llamado a todos los funcionarios de Colombia, y especialmente a los ex jefes del Estado para que tengan presente que “tenemos un gran deber con el país y es construir con nuestras palabras un clima de entendimiento, de perdón y de reconciliación”.

tomado de:eluniversal.com.co