Soportar dos cargas y sobre todo dos responsabilidades de manera simultánea, puede llevar a un agotamiento que como consecuencia más visible tiene no rendir en ninguna de las dos actividades.

 

Pero, ¿cómo lograr hacer las dos funciones sin sucumbir en el intento? Expertos consultados por LR dan unas recomendaciones que le pueden ayudar.

 

El profesor e investigador en temas de talento humano de la Universidad de Manizales, Gregorio Calderón, empieza por el principio: “administrar el tiempo”. En efecto, es algo que parece simple y hasta obvio, pero no muchos lo ponen en práctica.

 

“Cuando uno tiene que hacer múltiples actividades, planear el tiempo es fundamental y para administrarlo hay que tener objetivos claros. Una vez establecidos los propósitos, lo que se debe hacer es asignar el tiempo que cada objetivo o actividad requiere”, sostuvo.

 

Una de las mayores falencias que se detectan, dice el experto, es que se intenta hacer todo al mismo tiempo o ‘picar’ aquí y allá. Esto genera el riesgo de terminar en una confusión y no concluir las tareas del trabajo ni las del estudio. A cambio sí se puede pescar un cansancio que puede incidir en un bajo rendimiento en el trabajo y en el estudio.

 

El presidente de la Federación Colombiana de Gestión Humana (Acrip), Iván Darío Arenas, agregó que un ingrediente clave es que tanto el trabajo como el estudio genere pasión, es decir, que se desarrolle un gusto. Esto lo explica Arenas en el sentido de no ver las actividades como un yugo, carga o martirio. “Hay que mirarse como un beneficio para el desarrollo integral del ser humano. Es clave también que no se anteponga una actividad a la otra en términos de importancia. Deben estar en el mismo nivel para rendir en un lado y en el otro”, agregó.

 

Busque integrar ambas actividades

 

Los expertos coinciden en que el estudio y el trabajo no deben mirarse como opuestos y aunque algunos hacen estudios no relacionados con la actividad laboral, encontrar un punto que los integre permite sacarle más provecho a ambas circunstancias. “Las dos actividades se pueden integrar en un proyecto de vida”, dijo el investigador Gregorio Calderón. En el caso de las maestrías, señala el presidente de Acrip, Iván Darío Arenas, “exigen investigación y quienes las estudian pueden aplicar esto en las firmas donde trabajan”.

 

Tomado de: larepublica.co