Pedirle dinero a un amigo o hacer una ‘vaquita’ entre conocidos y familiares son algunas formas de conseguir capital para iniciar un negocio; sin embargo, en el lenguaje emprendedor actual, hay un equivalente digital: el fondeo colectivo o crowdfunding.

El fondeo colectivo es una vía para conseguir capital y que terceros avalen tu proyecto, ya sea para la fabricación de un reloj inteligente, capitalizar una productora o un proyecto para traer bandas de música pocos conocidas a México,

“Cualquiera puede poner su idea en una plataforma de crowdfunding y la gente decide si le gusta o no”, dijo el co fundador de la plataforma de fondeo para conciertos Bandastic, Luis López, conocido en la comunidad emprendedora como Lulo.

Para Lulo, este modelo se ha convertido en su forma de vida y de hacer negocio, del cual afirma que la belleza está en hacer a la gente parte de historias más que de proyectos económicos.

En Estados Unidos 83,575 proyectos han probado las mieles del fondeo colectivo a través de plataformas como Kickstarter; en México, sitios como Fondeadora han respaldado a la fecha 75 proyectos y a fines de 2013 sumarán 100, lo que significa un fondeo colectivo de aproximadamente seis millones de pesos provenientes de 5,000 personas.

“Hemos probado que este modelo democratiza el acceso a capital y en México está ganando tracción muy fuerte poco a poco”, dijo el fundador de la plataforma mexicana de crowdfunding Fondeadora, René Serrano, en entrevista con CNNExpansión durante su participación en Campus Party.

Distintas recompensas

El proceso para ingresar a una plataforma de crowdfunding es relativamente sencillo, sin embargo hay cuatro modelos distintos de fondeo colectivo, dependiendo del objetivo final del proyecto.

– Reward Based: recompensa al usuario que aporta, al llevar a cabo el proyecto.

– Equity based: dirigido a empresas consolidadas que buscan una aportación para un proyecto específico en el cual sólo pueden aportar inversionistas calificados, que se benefician con un porcentaje de las ganancias, como si tuvieran acciones en la compañía.

– Crowdbased: se trata sólo de aportar y el beneficio es la ayuda por sí misma.

– Royalties: se trata de aportar y saber que obtendrás regalías por cada ganancia que el proyecto haga al llevarse a cabo.

En Fondeadora, el modelo que se usa es reward based, que funciona muy bien para proyectos con impacto social. En Bandastic, la recompensa para el usuario es ver a una banda específica en vivo.

Al pensar subir tu proyecto a una de estas plataformas es recomendable tener por lo menos 80% del producto o proyecto sólido, aseguró René Serrano.

Los fundadores de Fondeadora, Bandastic y Crowdfunder coinciden en que en un futuro cercano este modelo será uno de los principales motores del emprendimiento en México pues busca materializar los gustos del usuario y empresario a la vez.

“Permite que las cosas que tendrían que existir exista (…); es como votar con tu dinero, por cosas que realmente importan se lleven a cabo y que las cosas basura no vengan al mundo” dijo Serrano.

Tomado de: cnnexpansion.com