¿La reforma a la Salud llena todas las expectativas del sector?

 

No. No contempla aspectos de calidad de los servicios. No exige indicadores de funcionamiento ni para los gestores ni para los prestadores de servicio.

 

La eficacia de la atención es determinante en los países desarrollados. La disposición de los médicos para con los pacientes es fundamental, para calcular el gasto en salud. A mayor calidad tenemos menos costos y mejor salud. Sin embargo, una reforma no puede contemplar todo.

 

¿Cómo afectará el proyecto de ley a los colombianos?

 

Creo que nos afecta positivamente. La ley hace que la atención se vuelva regional, así, el colombiano tendría acceso a la salud de manera más cercana y oportuna. Siempre y cuando el gestor promueva una mejor atención en el primer nivel. Así, el colombiano no tendrá enfermedades agravadas. Eso está en la ley actual y no se ha logrado.

 

Otro tema fundamental es el nivel de atención público a cargo de los entes locales, también está contemplado en el primer nivel de atención, pero no se ha mostrado.

 

En el papel, la Ley está muy bien planteada y permite garantizar el mejoramiento de la salud de los colombianos. Lo necesario es hacerlo operativo.

 

¿Salud-Mía se convertiría en un gran Fosyga?

 

Ese es el gran temor. Ojalá Salud-Mía no sea equiparada porque es una buena alternativa. La nueva entidad se tiene que blindar de la corrupción y del manejo político. Ahí es donde está la gran duda de los entes del sector. En los últimos años hemos adolecido de gobernabilidad del Ministerio de Salud, se ha venido empobreciendo de líderes (eximiendo al Ministro), de personas claves que manejen de forma integral el sistema. Lo que preocupa es que: si no tenemos gobernabilidad de la cartera, cómo le vamos a colgar un ‘monstruo’ de financiamiento.

 

Expliqué un poco el empobrecimiento de líderes en el Ministerio…

 

Mire. Hay una cosa clara. Ya casi nadie quiere trabajar en entidades como el Ministerio por el temor que genera. Hay tal ‘bombardeo’ de acciones jurídicas que hacen que los funcionarios quieran desistir.

 

El Ministro Gaviria decía “es que uno no tiene tanto poder como uno se lo imagina” esto es cierto. Él está cercado por muchas otras entidades que lo presionan.

 

¿Cree que la reforma está coja en cuanto a proteger a médicos?

 

El sacrificio de algunos actores tendrá que estar contemplado en la reforma. Las transformaciones hay que centrarlas en el objeto social, en este caso, la salud de los colombianos. Eso incluye sacrificar algunos servicios.

 

En el proyecto de ley, yo no veo que ellos se vayan a afectar ni positiva ni negativamente. Los médicos tenemos que entender que la razón del sistema no somos nosotros sino los usuarios. Eso puede incluir hacer cosas que nos disgusten.

 

¿Qué nos puede decir de la integración vertical?

 

Hay una preocupación con los prestadores en cuanto a la integración vertical, pues no es buena en ningún nivel porque genera conflicto de intereses.

 

Después de la reforma ¿Qué va a pasar con instituciones como la que usted está manejando?

 

Instituciones como la nuestra estoy seguro de que se van a fortalecer, porque son de carácter nacional.

 

Tomado de: larepublica.co